Polémica en la primera etapa del Rally de Montecarlo

La primera etapa completa del Rally de Montecarlo ha dejado un bonito duelo entre Ogier y Neuville por la punta de la prueba, pero también la primera gran polémica de la temporada 2019 del WRC. La cancelación del SS3 por culpa no sólo de aficionados mal situados, sino también de vehículos y caravanas mal aparcados, ha creado un gran malestar en Citroën y Toyota. En ambas formaciones alegan que la estrategia de su monta de neumáticos con un mayor número de gomas de clavos estaba supeditada al tercer tramo del rally, toda vez que tenía más hielo y nieve que el resto de especiales del bucle.

Por esta razón, en Citroën Racing decidieron solicitar la cancelación de todos los tramos del primer bucle, mismo planteamiento que ha esbozado Tommi Mäkinen, máximo responsable de Toyota Gazoo Racing, para criticar duramente al promotor del rally y a la FIA: "Me hubiera gustado ver las tres etapas canceladas. Nuestra estrategia al completo se basaba en todo el bucle, perdimos nuestro liderazgo y nadie asume las responsabilidades. A la FIA no le importa. ¿Qué pasa si perdemos el campeonato por esto? Este es el único rally del año en el que es afecta en gran medida la cancelación de un tramo. En Suecia no importa si cancelan una especial, todos llevan los mismos neumáticos".

Si bien el rally de los pilotos de Toyota ha quedado marcado por los pinchazos que sufrían Ott Tänak y Kris Meeke en el bucle vespertino, Tommi Mäkinen concluía: "Los organizadores del rally y la FIA ni siquiera entienden que estamos en el Rally de Montecarlo. Así son la cosas, una cancelación afecta al bucle entero. Creo que el organizador tuvo la culpa de permitir que todos esos espectadores y sus coches ingresaran en el tramo. Luego es injusto que Michele Mouton venga al tramo 15 minutos antes del inicio de la especial y diga que no se puede correr. Nadie entiende la situación general".

Fotos: Red Bull Content Pool