Un directivo de Polestar America devela secretos de los futuros modelos eléctricos

Poner el objetivo en una marca determinada es algo común entre los fabricantes. Los suecos de Polestar, dedicados a los eléctricos de altas prestaciones, se han marcado un objetivo muy serio, y en el que trabajan concienzudamente. Los escandinavos aspiran a ser la alternativa a la deseada Porsche, que trabaja en una nueva generación de modelos de cero emisiones paralela a la de combustión, y que ampliará la limitada opción actual con el Taycan como único representante.

Será por poco tiempo, y en el caso de la marca sueca también porque el primer modelo eléctrico completamente nuevo desembarcará a mediados de 2022. Es el Polestar 3, siguiendo en 2023 con el Polestar 4 y en 2024 con el Polestar 5. La nueva estrategia ha sido desvelada por Gregor Hembrough, director de Polestar Americas, en unas declaraciones en las que ha señalado que «Polestar quiere ser un competidor de Porsche en diseño, desempeño e innovación».

Polestar trabaja en un sofisticado motor eléctrico con 645 CV

Para lograr semejante objetivo, Polestar trabaja en un nuevo conjunto motriz eléctrico con el que será capaz de poner contra las cuerdas a los alemanes. Por ahora, se encuentra en una fase muy temprana, pues se estrenará a mediados de la década y lo hará a bordo del futuro Polestar 5, la berlina de altos vuelos que ya se ha confirmado y que será la materialización del concepto Precept. El nuevo conjunto motriz se conoce internamente como «P10», y del que se sabe que será un grupo muy compacto. El motor eléctrico ofrecerá una vez y media más la potencia de los motores del Porsche Taycan, por lo que dispondrá de una potencia máxima de 475 kW, equivalentes a 645 CV.

La misma unidad también sumará una caja de cambios automática de dos velocidades para absorber tal cantidad de potencia, y con la virtud de que podrá desconectarse automáticamente, y en función de las condiciones de conducción, para ahorrar energía de la batería y aumentar la eficiencia. Hembrough ha señalado que este desarrollo será propio y exclusivo de Polestar, por lo que ni Volvo ni Lotus podrán echarle mano. Polestar ha vetado el acceso a las dos marcas Premium del gigante chino de Geely, como también a las baterías.

Los dos componentes se montarán en una nueva plataforma de tipo space frame de aluminio, a la que tampoco tendrán acceso las marcas antes mencionadas, aunque sí que podrán aprovecharse del único desarrollo que se ha realizado a tres bandas: la arquitectura eléctrica, equipada con un sistema de carga de 400 V y 800 V. Solo con el primer sistema, la batería con una capacidad de 103 kWh puede cargarse al 80% en poco menos de 20 minutos. Polestar no se dejará en el tintero ni un solo detalle, pues considera también integrar carga bidireccional y «V2X» con una potencia de 20 kW. Lo que sea necesario para desbancar a Porsche.

Fuente: Green Car Reports