Por qué dicen que los coches eléctricos son un timo (y están equivocados)
Pocas grandes transformaciones se han hecho rápidamente, sin que nadie proteste, y sin argumentos en contra. Ha pasado con la transición del caballo al coche, con el amor libre, con la entrada de la mujer en el mundo laboral... y ahora, pues con los coches eléctricos.
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Publicado: 17/07/2023 22:30
Después de llevar años apoyando la movilidad eléctrica, hay algunos argumentos que, pese a haber quedado desfasados, siguen sonando como discos rayados. Hay otros que, pese a todo, siguen siendo vigentes hoy día. Es cierto que no son la solución para todo el mundo, pero los números nos dicen que son una solución para cada vez más gente.
En los últimos años, la iniciativa de unos pocos fabricantes -que se la han jugado mucho- y ciertas normativas han pegado un empujón a una tecnología que tenía mucho que decir, después de décadas siendo útil solo para aplicaciones ultraespecíficas, como carritos de golf, toros mecánicos o juguetes. Pero estamos en 2023, y algunos se quedaron en 2003 en cuanto a «estado de la técnica».
1) «Porque no puedes viajar»
Con los modelos de baterías pequeñas y recarga lenta, a ver, esto es verdad, pero también es verdad que el típico coche eléctrico a la venta sí permite viajar. Con poder recuperar energía para 100-300 km en 15 a 45 minutos sí, se puede viajar, aunque quizás cambiando algunas costumbres rígidas. También se podía viajar cuando se tardaban 9 horas del centro a la playa, sin aire acondicionado, y con motores de potencias raquíticas.
Hoy día, hace falta un poco de planificación, pero en menos tiempo del que quereamos darnos cuenta, habrá tantos puntos de recarga que no hará falta buscarlos, ni planificar. De hecho, ya hay señales de tráfico que anuncian su proximidad. Señores, sí, se puede viajar, y los que dicen que sí, suelen tener coches eléctricos; algo sabrán del tema. Algunos siguen pensando que los coches eléctricos tardan siempre 10-14 horas en cargar (solo en los enchufes más lentos de todos).
2) «Porque son demasiado caros»
Todos los coches que hay a la venta son, si comparamos con hace 5, 10, 15 años... muy caros. No hablamos solo de lo que mejora el equipamiento, tecnología o seguridad, es que son caros, usen lo que usen, aunque también suelen ser mejores. En coches eléctricos es cierto que hay que invertir más al principio (o financiar un capital más alto), pero otros muchos gastos bajan bastante o no existen.
Entre el combustible que dejamos de comprar y el mantenimiento que deja de ser necesario (no todo, ojo), se ahorran miles de euros durante la vida útil
Los diésel también eran más caros que los gasolina, como 1.000 a 3.000 euros más en los buenos tiempos, y eso no fue óbice para que mucha gente se los comprase. Incluso los que nunca los amortizarían. Pues algunos coches eléctricos tienen esa diferencia de precio con la versión ICE (combustión interna) equivalente, ya sea o no aplicando las ayudas a la compra.
3) «Porque no quieren que los pobres tengamos coche»
Es cierto que hay unos señores en el foro de Davos jugando a dominar el mundo, pero eso depende más de nosotros (consumidores) que de ellos (teóricos). Pobres y ricos siempre tendrán coches a su alcance, mejores o peores. Los coches eléctricos no van en contra al derecho a la movilidad privada. Al revés, son un salvoconducto contra limitaciones de circulación por emisiones.
Los «pobres» de la actualidad se pueden comprar los mejores coches a los que han podido optar jamás. Algo me chirría en ese razonamiento
A lo mejor, bajándonos un poco de la burra en cuanto a pretensiones, pues no está tan lejos un modelo que nos sirve perfectamente. Insisto, nadie necesita 500 km de autonomía a pilas, con que se puedan hacer 300 km reales a velocidad de autopista, es más que suficiente. Eso sí, que las recargas duren menos de media hora. A lo mejor algunos son pobres por tener el coche equivocado y con gastos de mantenimiento equivocados.
4) «Porque no son eficientes»
En el excusómetro, me declaro fascinado cada vez que escucho esta. Hacen distancias moderadas con baterías, no como el depósito de un buen diésel. Sin embargo, recordemos que grosso modo, cada 10 kWh de baterías equivalen a 1 litro de zumo de dinosaurio. A ver a dónde llegamos en un diésel con 5 litros en el depósito (ni uno más). Difícilmente más de 100 km. Un eléctrico con 50 kWh puede hacerse incluso más de 300 km.
Recordatorio: las baterías duran mucho más que las de un móvil o un portátil, no hay que irlas cambiando salvo siniestros, defectos de calidad o muy mal uso
No hay que confundir eficiencia energética con densidad energética, son cosas muy diferentes. Las baterías son muy grandes y pesadas para llevar «un litro de energía», eso sí, no se desperdicia más del 60% de la carga. Los térmicos del montoncillo convierten menos del 40% de la energía del combustible en kilometraje. El resto se va en generar calor, ruido y emisiones. ¿Y esos son los eficientes? Me desorino.
5) «Porque no hay dónde enchufarlos»
¿Hablamos de recarga pública? ¿Lenta, semirrápida, rápida, ultrarrápida? ¿En corriente alterna o continua? ¿En cada casa? ¿En cada farola? Si hablamos de los enchufes que hacen falta fuera del lugar habitual, a veces hay que usar una aplicación móvil para encontrar puntos de recarga. A lo mejor una app no marca que están, ídem con el navegador a bordo, pero otra sí. Puede haber puntos de carga más cerca de lo que piensas.
Cuanto más aumenta el parque móvil de eléctricos, más puntos de recarga hay, puesto que hay más clientes. No tiene demasiado sentido a nivel económico que las empresas pongan puntos de recarga para millones de coches si su número va por decenas de miles -¿quién paga eso?-, pero sí lo tiene que, según hay más clientes (demanda), pues haya más enchufes (oferta). Hasta parece lógico si pensamos en ello.
Y así con todo, dice más gente que los coches eléctricos son un timo (sin tener uno), que los que tienen coches eléctricos y dicen que son un timo. ¿Qué opinión tiene más valor?