El importante cable que Alemania le ha echado a Porsche con los e-fuels en Bruselas, y quién es el gran beneficiado

Alemania ha sacado la cabeza la contienda que mantenía con Europa por los combustibles sintéticos, el verdadero trasfondo de la esperpéntica situación que ha puesto contra las cuerdas a los comisarios de Bruselas. El gobierno federal nunca se opuso a los coches eléctricos como norma, pero sí al hecho de no poder extender la combustión tradicional más allá de 2035, con otro tipo de combustibles no fósiles, los llamados sintéticos.

Un importante «cable» que le ha echado a Porsche, que se ha gastado una ingente cantidad de dinero en la investigación y producción de gasolina sintética, que no diésel. Una ayuda también para las marcas de nicho, cuya producción de modelos de altísima gama y de prestaciones al nivel de un hypercar apenas suponen una ínfima parte de las ventas del mercado, abriendo una puerta también a otras marcas de prestigio. La italiana solo disponía de un año más de tregua al no ser una marca de volumen, lo cual ahora le permite beneficiarse del uso de e-fuels.

e-Fuels para Porsche, eléctricos para todo el grupo Volkswagen

Eso, como las marcas más prestigiosas del grupo Volkswagen, será decisión propia en sus futuras estrategias. Oliver Blume ha celebrado este hito logrado tras una lucha encarnizada, en la que las marcas no han tenido participación, ya que la Unión Europea decidió no escuchar sus argumentos. El gran jefe del grupo Volkswagen, hasta hace poco de Porsche, fue el que consiguió hacer realidad el Taycan cuando pocos daban un duro porque la marca deportiva consiguiese transformarse por completo, y el que también se ah responsabilizado del desarrollo del nuevo Macan E y el 718 Boxster E.

Tres eléctricos contra los que no tiene nada, todo lo contrario, pero que también está convencido de que con los combustibles sintéticos se puede continuar con una tecnología tradicional sin realizar modificaciones técnicas. El gran jefe ha dejado claro que los coches eléctricos serán la norma en las marcas del grupo Volkswagen, incluida la firma deportiva, pues el Cayenne Eléctrico y el «Landjet» lo serán en poco más de dos años. Diferentes responsables de la marca ya han confirmado, por activa y pasiva, que el último modelo que se transformaría en 100% eléctrico será el 911.

El Porsche 911, el único gran beneficiado en Wolfsburg

Y esto mismo lo ha confirmado ya el propio Oliver Blume. El icónico deportivo alemán será híbrido a muy corto plazo, y podrá continuar con su vida comercial más allá de 2035 alimentado con gasolina sintética, por lo que no se convertirá en un eléctrico en mucho tiempo. Eso no significa que la marca no investigue en tecnologías especialmente para este modelo a muy largo plazo, pero sí se asegura su continuidad como modelo de combustión solo con combustibles neutros en CO2.

Blume también ha dejado entrever un detalle muy especial del futuro del 911, la producción del modelo en pequeñas series «especiales para los fans». Es decir, que no descarta que se transforme en eléctrico pero con e-fuel en versiones muy, muy deportivas, que vende en contadas unidades.