Este Porsche 911 Targa era el coche de policía más rápido del mundo
En la década de los setenta, Bélgica contaba con los coches policiales más rápidos del mundo, una pequeña flota compuesta por 20 ejemplares del Porsche 911 Targa 1976 equipados con el impresionante motor del 911 Carrera RS 2.7 de 1973.
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Publicado: 25/11/2018 16:00
Aunque esta unidad dejó de prestar servicio hace ya muchos años, gracias a su apasionado propietario sigue disponiendo de un estado muy próximo al que contó en su día, cuando era uno más de los vehículos oficiales de la policía belga.
Este cuerpo de policía contaba con una pequeña flota de estas unidades, 20 ejemplares del Porsche 911 Targa G-Series, que no dejaban de ser parecidos a los de otros cuerpos policiales europeos de la época, como el de los Países Bajos, pero que en el caso de los belgas contaban con una diferencia fundamental, un motor bastante más potente.
Aunque los 911 G-Series ya contaban con un flat-six de 2.7 litros atmosférico, un derivado del motor empleado en el Porsche 911 Carrera RS 2.7 de 1973 pero convenientemente dulcificado, los 911 Targa de la policía belga empleaban el mismo bloque inalterado del Carrera RS, con sus 212 CV (210 hp) intactos, que convertían a estos ejemplares en los coches de policía más rápido del mundo en la época. Hablamos de finales de la década de los setenta y principios de los ochenta.
Según este reportaje de Petrolicious, que podéis encontrar al pie del artículo en forma de vídeo, tras prestar servicio durante años este ejemplar estuvo almacenado durante décadas, hasta la llegada de este apasionado coleccionista que se había obsesionado con estos modelos de la policía belga.
De los 20 ejemplares originales tan solo habían logrado sobrevivir hasta nuestros días unos pocos, concretamente solo 3, ya que los 17 ejemplares restantes terminaron sus días en la carretera prestando servicio. En este caso, el ejemplar no solo se encontraba en un estado de conservación aceptable sino que gozaba de un estado totalmente original, ya que contaba incluso con todos los elementos y accesorios originales, como podemos ver en el vídeo y las imágenes de Petrolicious.
Ari Epstein, su propietario, estaba tan obsesionado con estas versiones policiales del 911 que pasó 2 años buscando una unidad, hasta el punto que logró encontrar todos los datos incluidos los números de bastidor de los 20 modelos originales empleados por la policía belga. Por lo que conoce detalles tan curiosos como la explicación a por qué empleaban unidades de la versión Targa y no de la versión Coupé, en teoría más rígida, y es que al eliminar el techo duro los policías podían asomarse por encima y dar señales a otros conductores sin necesidad de bajarse del vehículo o de detenerlo.
Fotos: Petrolicius