Video: los Porsche con alerones más salvajes
El fabricante de Stuttgart publica su propio ranking con los alerones más salvajes y agresivos de sus modelos A modo de Top 5, nos enseña modelos de calle y de competición con los respectivos spoilers que contribuyeron a su recuerdo
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Publicado: 23/02/2017 19:00
Porsche continúa regalándonos a los ojos piezas de video en forma ranking Top 5. Tras pasar por el mejor sonido y los coches de calle más raros; ahora llega el turno de los alerones más salvajes de la firma alemana.
Mezclando modelos de producción y competición, los de Stuttgart nos hacen una muestra de sus diferentes spoilers traseros y coeficientes aerodinámicos de cada modelo así como, el pequeño repaso histórico y avance tecnológico que se ha ido desarrollando a lo largo de los años.
El ganador de este ranking es el Porsche 935 Moby Dick, un modelo desarrollado específicamente para competir en las 24h de Le Mans de 1978 basado en el 935 (que a su vez está basado en el 930 Turbo de calle). Una potencia entre 750 y 850 CV y 366 km/h de velocidad punta con una trabajadísima aerodinámica protagonizada en gran parte por la peculiar cola de ballena que exprimía al máximo el reglamento de la FIA.
La segunda posición es para el Porsche Panamera Turbo, y como no podía ser menos su futurista alerón trasero que, como si de un Transformer se tratase, no sólo se abre sino que se despliega para aumentar su anchura y por lo tanto agarre a altas velocidades.
En tercer lugar, el Porsche 911 RS 2.7 repite aparición en video gracias a su "cola de pato" mientras que, ocupando el cuarto lugar nos encontramos al Porsche 959 que tuvo que ser homologado de calle por exigencias de la FIA para poder competir en el Grupo B y nos dejó como legado su peculiar y aerodinámico alerón trasero integrado en la carrocería que otorgaban un coeficiente aerodinámico de 0,31.
Y en último lugar, pero no por ello menos importante, el Porsche Cayman GT4, un modelo relativamente actual que destaca por ser una agresiva versión trackday del biplaza deportivo del que deriva y que, entre sus mejoras y puesta a punto incluye un alerón fijo de sobredimensionado tamaño realizado en fibra y aluminio que mantiene el coche pegado al asfalto.