El Centro Porsche Madrid Norte reabre sus puertas totalmente reconvertido

Instalaciones de vanguardia para un centro de referencia en la península

El 87 de la Avenida de Burgos no tiene un nuevo inquilino, pero quién lo diría. Las instalaciones de Porsche Madrid Norte han sufrido tal renovación que bien podría ser nuevo. Casi dos años han durado las obras de este centro que se aleja del típico concepto que tenemos de concesionario. Una experiencia para todos aquellos propietarios de un Porsche y para todos aquellos que todavía no lo sean.

Aunque no lo parezca el recinto lleva asociado a la marca alemana desde finales de los años 80, cuando Porsche compró la propiedad a una antigua empresa de construcción, Miguel Ortega S.A. Años después se acometió una importante obra de remodelación y ampliación que quedó marcada para siempre por su "legendario" ascensor. A día de hoy esas obras quedan en el pasado dando pie a la apertura de un centro único en nuestro país.

Los tiempos cambian y la forma en la que se presentan los coches en un concesionario también. A día de hoy un cliente llega con los deberes hechos gracias a Internet y a las múltiples plataformas y redes sociales que existen, y por supuesto comprar un Porsche no puede ser igual que comprar cualquier otro, por lo que ese proceso debe convertirse en una experiencia que recordar tanto como tener el propio coche.

El taller ha sido renovado y ampliado para hacer frente tanto al pasado como al futuro

Para conseguir tal fin Porsche Ibérica y Porsche Madrid Norte ha diseñado unas instalaciones más propias de un centro social que de un concesionario en sí mismo. La intención es que todo aquel que quiera vivir la experiencia Porsche lo pueda hacer, ya sea siendo propietario o no. Repartidos por diferentes lugares del edificio encontramos salas de reunión, una biblioteca, una exposición, una cafetería, una zona infantil y una zona histórica donde de forma periódica rotativa se expondrán diferentes modelos míticos de la firma.

En el momento de su reapertura el centro cuenta con tres joyas impresionantes. Un Porsche RS Spyder de 2005 que por decirlo de alguna manera fue el germen con el cual la marca volvió a la categoría de prototipos en las carreras de resistencia. Además está presente el Porsche 911 SC Safari con el cual se disputó la dura prueba del Rally Safari en el año 1978. 5.000 kilómetros de pistas tan abiertas como salvajes donde tan solo 13 de los 72 coches iniciales cruzaron la línea de meta, dos de ellos Porsche.

El último es sin duda alguna el más singular de los tres al tratarse de un prototipo casi único que apenas ha pisado el asfalto fuera del museo de Porsche en Stuttgart. Se trata de un Porsche 928 Cabriolet. Un estudio de diseño encargado a una empresa californiana que supuso un intento fallido de presentar en el mercado un 928 con techo de lona retráctil. Huelga decir que tal atrevimiento nunca vio la luz por problemas con el presupuesto.

Tres joyas del museo Porsche que son las primeras de una exposición itinerante

Por supuesto las instalaciones dedicadas al cuidado y mantenimiento de los vehículos también se han renovado. El centro cuenta con un total de 1.639 metros cuadrados destinados a taller. Un sitio mágico donde cada Porsche es tratado con sumo mimo y donde cada unidad es devuelta a la carretera en perfecto estado. Las mejoras de las instalaciones se han centrado en incrementar la optimización de los trabajos para que cada reparación se realice en el menor tiempo posible sin por ello perder calidad en el proceso.

Las instalaciones se sitúan a la vanguardia del país, siendo éste el único centro autorizado en la península para realizar ciertos trabajos altamente especializados realizados a cargo de personal con las máximas calificaciones dentro de la marca a nivel global. Por supuesto en esta preparación de cara al futuro tiene un importante peso la electrificación. Dichas instalaciones pretenden ser un centro de referencia en dicho campo, tanto en cuanto a reparaciones como a puntos de recarga. Seguro que el futuro Porsche Mission E tendrá un peso muy importante.

Si hablamos de Porsche hay que hablar de competición y deportividad. La firma tiene en su ADN las carreras, y algunas de las más legendarias están presentes en las instalaciones donde despachos o salas de reuniones han sido decorados a modo de recuerdo de alguna de las carreras más legendarias disputadas y ganadas por los de Stuttgart. Targa Florio, Daytona, Sebring, Nürburgring, y por supuesto Le Mans.

Cada sala ha sido decorada con algunas de las carreras más legendarias que hay

Los trabajos y las reformas también han servido para que el centro haya sido homologado por el departamento de Porsche Classic como un lugar de referencia donde poder llevar a los más clásicos. Dicha certificación viene dada por sus instalaciones e instrumental, pero sobre todo por su personal que una vez más se sitúa como claro expertos en cada uno de los coches que tratan.

Seas cliente o un aficionado a la marca y al motor serás bien recibido en las nuevas instalaciones de Porsche Madrid Norte. Un nuevo concepto de concesionario que pretende convertirse en un centro de experiencias y peregrinaje para aquellos que admiren a la marca. Por supuesto si es para recoger a algunas de sus joyas, mejor que mejor.