¿Es posible el regreso del Campeonato del Mundo GT?

GTLM, GTE, GT3, IMSA, WEC, SRO... El mundo de los GT ha vivido en los últimos años una gran expansión, lo que ha provocado una diversificación de las especificaciones de los GT. Aunque la base para todos estos modelos y campeonatos está en mayor o menor grado en los coches GT3, lo cierto es que las marcas encuentran grandes problemas para poder tener un programa global. En este aspecto y a tenor de la creación de una Copa del Mundo de GT en el GP de Macao, la FIA podría estar valorando el regreso del desaparecido Campeonato del Mundo de GT.

Cabe recordar que en 2010 ya se creó el Campeonato del Mundo FIA GT1 gracias a Stéphane Ratel, aunque el campeonato no prosperó. Este hecho provocó que en 2013 se diera paso a las FIA GT Series, campeonato que a su vez ha acabado por mutar hasta las actuales Blancpain GT Series. Mientras que SRO parece muy contento con su nuevo producto gracias al 'Balance of Performance', la ausencia de equipos oficiales y la obligatoriedad de que cada marca que quiera poner un coche en competición deba tener al menos dos unidades en cada prueba del campeonato, el panorama GT está muy desorganizado.

En este aspecto, no hay más que mirar las especificaciones de los distintos GT para entender la problemática actual para una de las categorías de vehículos más exitosas en décadas. En los certámenes dependientes del IMSA se utilizan vehículos bajo especificaciones GTLM, lo que viene a ser un nombre distinto para los vehículos GTE que se utilizan en el Mundial de Resistencia (WEC). Estos coches vitaminados bajo la nueva reglamentación técnica distan en la aerodinámica y en otros detalles en relación a los GT3, coches que copan las Blancpain GT Series, copas monomarca y categorías nacionales.

Estas diferencias provocan descontentos a todos los niveles. Los pilotos que compiten en GTE-Pro en el WEC no ven reconocido su trabajo al no ser un Campeonato del Mundo de pleno derecho, mientras que las marcas se ven obligadas a desarrollar dos vehículos distintos, como es el caso del Ferrari 488 GTE y GT3 o de BMW, que contando con un M6 GTLM y un M6 GT3 estaría dispuesto a desarrollar un BMW M6 GT3. En este aspecto y con la normativa GTE y GT3 cada vez más lejos de unificarse, un Campeonato del Mundo de GT con vehículos GT3 podría ser el primer paso.

Fuente: Auto Motor und SportFotos: Blancpain GT Series