La escalada de los precios de los coches nuevos no solo es culpa de los microchips o la Euro 7, hay un factor clave más
La escalada en los precios de los coches nuevos no parece tener fin. Tras la escasez de los microchips y el alto coste de materiales por la guerra de Ucrania o la nueva garantía impuesta por Europa, ahora se une otro factor más que aún subirá más los costes y los precios, y los de ocasión como consecuencia.
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Publicado: 27/02/2023 19:00
La escalada de precios de los coches parece no tener fin. Las marcas se han encontrado con una nueva situación en la industria automovilística tras la pandemia del Covid-19 que no esperaban venir ni por asomo. Los paros obligados de producción por esta situación especial se sumó a la gran escasez de microchips y, posteriormente la guerra de Ucrania ha ocasionado un elevado coste de las materias primas fundamentales para la producción de coches nuevos.
Un factor clave que obligó a las marcas a buscarse otros proveedores, y al que se ha sumado también la Euro 7. La nueva norma de emisiones, que entrará en vigor en 2026, está poniendo contra las cuerdas a los fabricantes. Estos han negado tajantemente que superar los exigentes requisitos cueste «entre 200 y 300 euros más» como apuntaron desde la UE. El cumplimiento exige aumentar el precio una medida de 1000 euros, según marca y modelo, llegando al punto de que algunas marcas prefieren sacrificar modelos.
La prevención de accidentes, clave en los precios de coches nuevos
Pero no es la última causa, porque hay otra que también es clave. El quebradero de cabeza para las marcas no ha terminado, porque la Unión Europea también introdujo novedades en el Reglamento general de seguridad de los vehículos nuevos en 2019, afectando a todos los modelos de vehículos nuevos desde el 6 de julio de 2022 y afectará a todas las nuevas matriculaciones desde el 7 de julio de 2024.
Los modelos más modernos ya cuemplen con la nueva normativa de prevención de accidentes «GSR2», incluyendo sistemas como la frenada de emergencia, reconocimiento de señales, el asistente de mantenimiento de carril, el aviso de fatiga del conductor y la alerta de tráfico trasero con sensores o cámara. Muchos modelos, principalmente los más baratos, todavía no disponen de alguno de estos sistemas en el equipamiento de serie, por lo que las marcas están abocadas a dos dos soluciones, una barata -que también puede salir cara- y la verdaderamente cara.
Ceder o morir, las dos opciones de las marcas ante la escalada de precios
La primera es retirar el modelo de producción, cuya consecuencia es perder un volumen de negocio que puede ser muy importante para la marca, lo que supone perder unos muy pingües beneficios. La segunda es implantar los sistemas de seguridad, a sabiendas de que el precio se encarecerá nuevamente. Euro 7 y los nuevos asistentes de seguridad están condenando a algunos modelos muy relevantes.