La UE tiembla ante las próximas elecciones europeas, un candidato alemán promete anular la imposición obligatoria de los coches eléctricos a partir de 2035

Coches eléctricos sí. Es lo que quiere la Unión Europea a partir de 2035 a pesar de que los ciudadanos no estén a favor de la medida, pero no los ciudadanos ni algunos países miembros que tampoco están de acuerdo en una decisión tomada sin ningún tipo de estudio previo ni tampoco con la participación de los fabricantes, que son parte implicada. Una situación que la UE se niega a debatir, por lo que ya es asumida como que será una realidad en menos de doce años.

La gran preocupación de los europeos en el abandono de la combustión y la transición a los coches eléctricos, que solamente afectará a las ventas de coches nuevos, reside en el el elevado precio, autonomía y prestaciones, además de en la infraestructura de carga. A sabiendas de que las quejas llegan de todos los actores implicados, el candidato alemán a las elecciones europeas que se celebrarán en 2024 quiere anular la prohibición de los coches nuevos con motor de combustión a partir de 2035.

La propuesta para las elecciones europeas puede tumbar una medida nada popular

Si gana. Una de las propuestas que lleva en su programa y con la que pretende ganar puntos para superar a sus adversarios. Weber ha señalado a la prensa bávara que «Si mi grupo logra la mayoría después de las elecciones europeas, revocaremos la prohibición de los motores de combustión aprobada por el Parlamento Europeo en esta legislatura», añadiendo que «Me gustaría utilizar esta revisión para remediar esta decisión tomada por los Rojos y los Verdes, que conduce a enormes desventajas competitivas para la UE».

Frente al candidato conservador, el actual ministro federal de Transportes, Volker Wissing, que logró que la Unión Europea admitiera una exención para el uso de combustibles sintéticos en modelos especiales como los de Porsche y otras deportivas, incluidos los clásicos, busca ahora ampliar ese acuerdo para mantener la combustión tradicional a flote después del último día de 2034, aunque no todos. Solo los coches con motor de gasolina, una moción que se ha pedido para estos pero no para los diésel, más difícil de producir y, además, que cada vez más marcas están dejando de lado este combustible con la hibridación.

Combustibles sintéticos para todos los coches nuevos, el sueño alemán

Wissing ha afirmado que «su gobierno tiene una posición clara y creemos que podemos lograr un resultado», tras confirmar que se están llevando a cabo reuniones con la Comisión de Transportes de la UE, encargada de la materia y responsable de la decisión. La intención, si no se extiende a todos los coches nuevos, es lograr que la Unión Europea considere una categoría separada para estos vehículos. Una estrategia que no está exenta de problemas, pues la gran mayoría de marcas ya asumen coches eléctricos para todos, que la producción de la gasolina sintética genera emisiones de CO2 y el precio, teniendo en cuenta que si se otorgase la licencia, también serían menos los coches nuevos de combustión fabricados a partir de 2035.