Análisis: así queda el mapa de Europa tras la compra de Opel por PSA

Sede de Opel en Rüsselheim.

El paso de Opel al Grupo PSA será un movimiento bastante más complejo que el de la simple absorción de una compañía por otra, pues la firma alemana hasta ahora había sido el eje de las operaciones de General Motors en Europa. Papel que precisamente se había acrecentado en los últimos años, por lo que se verá afectado el entramado completo de la corporación estadounidense en territorio europeo.

Para poder entender la magnitud de esta operación, primero debemos analizar la propia naturaleza de la misma al completo, ya que incluso tras la marcha de Chevrolet de Europa, los intereses de GM en el viejo continente no solo se limitaban a las marcas Opel/Vauxhall, aunque estas compusieran la inmensa mayoría de la estructura.

La mayor parte del entramado europeo de GM corresponde precisamente a Opel, que cuenta hasta este momento con 8 centros repartidos en 5 naciones diferentes, como podemos ver en la tabla inferior, mientras que Vauxhall dispone de dos plantas en el Reino Unido.

Junto a estas, en el viejo continente también podemos encontrar instalaciones de GM Powertrain, ahora llamada GM Global Propulsion Systems, una división de General Motors que se dedica exclusivamente al desarrollo y fabricación de mecánicas y transmisiones. Esta opera de manera independiente, como cualquier marca de GM, por lo que tiene la consideración de fabricante OEM o de equipos originales, en lugar de operar a modo de división o departamento de alguna marca del grupo.

Aunque la mayor parte de su trabajo está destinado precisamente a las marcas automovilísticas de la corporación estadounidense, desde Opel hasta Cadillac, GM Powertrain dispone en su catálogo también de mecánicas para otros sectores, como el marino o el industrial.

En Europa hasta ahora contaba con dos centros. Por un lado, GM Powertrain Poland, con la factoría de Tychy, Polonia, y GM Powertrain Torino, un centro de investigación y desarrollo situado en la ciudad de Turín.

Planta de GM en Tychy, Polonia.

La fábrica de Tychy fue fundada en los años noventa por Isuzu como Isuzu Motors Polska Sp. Z o.o. (ISPOL) y en 2002 GM se hizo con el 60 por ciento de la compañía. No fue hasta 2013 que se hizo con el control total de la planta, aunque en 2011 pasaba a formar parte de la organización de Opel. Esta cuenta actualmente con 410 empleados y se dedica exclusivamente a la fabricación de motores para distintos modelos de la marca alemana. Esta planta, integrada en la estructura de Opel desde inicios de esta década, será controlada a partir de ahora por PSA.

Por otro lado encontramos el centro de Turín, fundado en 2005 y desde 2008 integrado en el prestigioso Politécnico de Turín. Este centro data de la época del acuerdo entre GM y Fiat, cuando ambas compañías poseían acciones la una de la otra. En aquel momento, formaba parte de la estructura de Fiat-GM Powertrain. Este centro está especializado en el desarrollo de motores diésel y tras la venta de Opel, seguirá formando parte del entramado de GM Global Propulsion Systems.

Por último, encontramos el entramado comercial de Cadillac y Chevrolet en Europa, encargados de comercializar la gama Cadillac además del Corvette y el Camaro a través de su pequeña red de concesionarios. De la cual ya te hablamos en profundidad hace unos días, debido al escaso éxito que han obtenido en los últimos tiempos. Una estructura que seguirá operando, reportando directamente a Detroit.

Opel Astra en pruebas en Rüsselheim.

Tras la absorción de Opel, el mapa del Grupo PSA se modificará bastante, pasando a tener un total de 28 plantas productivas repartidas en 9 países, desde España a Polonia. Con un entramado industrial de semejante tamaño, suena bastante complicado que no veamos algunos ajustes de personal o incluso cierre de plantas en un futuro.

Opel, por el momento, continuará operando de manera independiente. Los modelos que ya estaban programados como el Insignia serán comercializados según los planes iniciales, siendo Opel además la encargada de fabricar las versiones Buick y Holden de este, pasando factura a GM por ello. Sin embargo, aquellos que estaban ya en desarrollo serán detenidos, como el Opel Corsa, que retrasa un lanzamiento al menos un año.

Una vez PSA tome el control de Opel/Vauxhall, el siguiente paso será replantear todos los proyectos en marcha, y los futuros, bajo plataformas de PSA. El primer motivo es que emplear las plataformas o tecnologías de GM tendrá un costo adicional en forma de licencias, y en segundo lugar porque esa es precisamente la intención primera de PSA, rentabilizar sus plataformas y tecnologías, presentes y futuras, al ampliar su volumen de producción sumando las unidades de Opel/Vauxhall.

El Internationalen Technischen Entwicklungszentrums (ITEZ)

Esto será llevado a cabo por el el centro de ingeniería de Opel en Rüsselsheim, situado en la misma sede de la marca en Alemania. Este centro, denominado Internationalen Technischen Entwicklungszentrums (ITEZ), es probablemente una de las joyas de la corona del trato PSA-Opel. El talento y las capacidades que posee en cuanto a ingeniería son bien conocidos. Aquí se desarrollan motores, transmisiones, sistemas de suspensión y sobre todo, plataformas de tracción delantera.

Los profesionales del ITEZ fueron los responsables de plataformas como las Delta 2 y Epsilon 2, en la que se basan multitud de modelos de General Motors, que podemos encontrar en muy diversos mercados, desde Estados Unidos hasta China.

La implantación de las nuevas plataformas de PSA, EMP1 y EMP2, correrá a cargo del ITEZ, y más que probablemente, veamos el resultado de su trabajo trasladado a otras marcas de PSA, no solo Opel o Vauxhall.