PSA anuncia una fábrica en Túnez, el Magreb está en boga
El Grupo PSA producirá localmente en Túnez de aquí a dos años, siendo el primer modelo anunciado un pick-up. El futuro modelo, de marca Peugeot, será en principio para el mercado local, aunque a medio plazo puede ser un centro exportador.
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Publicado: 29/11/2016 21:00
Los fabricantes franceses están apostando firmemente por el norte de África. Cada vez más producción se va a instalar en esa parte del continente, donde Renault (y Dacia), Peugeot y Citroën son líderes del mercado y marcas preferidas por la mayor disponibilidad de repuestos para modelos antiguos.
Se ha celebrado en estos días la Conferencia Internacional de Inversión "Tunisia 2020", donde el Grupo PSA ha reafirmado su intención de contribuir al despegue industrial de este país a pesar de la cierta inestabilidad que padece. El terrorismo ha afectado al turismo y al ánimo de los inversores. Recordemos que en 2015 Da'esh mató a 59 turistas y 13 tunecinos en un ataque contra el sector turístico.
Dado que PSA quiere vender en la región un millón de unidades para 2025, es necesario aumentar la capacidad de producción en esos países, para qe el mercado local se abastezca a precios más competitivos, a la par que se desarrolla un parque de proveedores que no solo atenderá las demandas de la zona, también pueden lijar costes para modelos europeos.
El Grupo PSA y su socio local STAFIM han firmado una declaración de intenciones. A mediados de 2018 comenzará la producción de un modelo pick-up de marca Peugeot, del que aún no sabemos nada, a un ritmo de 1.200 unidades para el mercado tunecino. Este tipo de vehículo es muy apreciado en países donde no hay precisamente autopistas asfaltadas a todas partes, es más, incluso ha llegado a ser un temido vehículo bélico por su movilidad y versatilidad a un coste muy razonable.
En la firma del acuerdo han estado presentes figuras de gran calado, como Béji Caïd Essebsi, Presidente de Túnez, y representando al Gobierno de Francia Manuel Valls, el Primer Ministro. Por parte de PSA ha estado Jean-Christophe Quémard, es decir, el Director de la Región Oriente Medio y África del Grupo PSA. En este encuentro el país africano está buscando múltiples inversores extranjeros para reflotar su economía.
Túnez es el último país árabe en el que PSA quiere hacer más negocio. Otro país, un poco más lejano, en el que se han reactivado las cosas, ha sido Irán. Según se van dando las condiciones políticas y económicas adecuadas, el dinero se empieza a mover. PSA cree mucho en esta parte del mundo, es un mercado emergente puro y duro: la relación coches/habitante es cuatro veces inferior a la europea.
Repasemos brevemente los planes de PSA para el Magreb. Tres años después de que Renault abriese su fábrica de Tánger (2012), PSA firmó un acuerdo con el Gobierno de Marruecos para montar una fábrica en Kenitra, muy cerca de la planta de su rival y de la capital Rabat. El objetivo a largo plazo, 2023, es de 200.000 vehículos anuales si las cosas van bien. PSA no solo montará fábricas, también tendrá un centro técnico regional con 1.500 empleados.
Solo en Kenitra PSA meterá casi 600 millones de euros
PSA quiere producir modelos de bajo coste -o precio razonable- y aligerar carga de trabajo a la fábrica de Vigo. Se puede entender como una deslocalización, pero los trabajadores gallegos podrán dedicarse a modelos de precio superior, que son más rentables, añadiendo más valor a la cadena. Los Peugeot 301 y Citroën C-Elysée son claros candidatos para ello, o sus sustitutos...
De momento Argelia y PSA siguen negociando para montar otra fábrica en su suelo. Es decir, PSA tendría, para 2020, tres fábricas operativas en la región. La produccioń comenzaría a partir de kits parcialmente ensamblados (CKD) con una cantidad cada vez mayor de componentes locales. En una fase más avanzada llegarán la producción de carrocería y pintura con el mínimo contenido de origen europeo, para abaratar los costes.
En resumen, los fabricantes franceses están fijándose mucho en la zona, pero no son los únicos. Recientemente conocimos las intenciones de Volkswagen de fabricar en Argelia. Estos países -Marruecos, Argelia y Túnez- tienen las mejores condiciones de estabilidad de la zona, son los sitios más idóneos para montar este tipo de industrias. De los tres, Marruecos es el que más capacidad de producción tiene.
Lleva años tener un tejido industrial completo en este negocio. Las fábricas necesitan muchas piezas: acero, neumáticos, asientos, motores... y es necesario que los proveedores no anden muy lejos. Los atractivos salarios de la región, muy bajos en relación a los europeos, así como unas condiciones laborales más ventajosas para los empresarios, hacen que el Magreb sea un polo industrial muy prometedor.
La industria del automóvil africana se concentra principalmente en Sudáfrica, pero también hay presencia en Egipto a pesar de los problemas que tiene ese país desde las llamadas primaveras árabes de 2011. Poco a poco las aguas se irán calmando, y el norte de África verá cómo llega el desarrollo a sus economías. El si va a perjudicar o no a Europa, es pronto para saberlo.