El Rally de México cumple su amenaza de dureza

Con un formato muy estandarizado y pautado por parte de la FIA y del promotor del WRC, los rallies buscan elementos diferenciadores. Tramos nocturnos, especiales urbanas o la ausencia de asistencias intermedias suelen ser elementos que dan un poco de color a las distintas pruebas del Mundial de Rallies. En 2015 la propuesta del Tour de Corse con sólo nueve especiales dio mucho que hablar, aunque las lluvias torrenciales en la isla de Córcega aguaron el rally. Para la próxima temporada, el Rally de México refuerza su apuesta por la dureza con especiales más complicadas, largas y duras. Un tramo de 80 kilómetros será el protagonista de la prueba.

El Rally de México tendrá 22 especiales con un total de 402 kilómetros contra el crono, siendo a priori la cita con un recorrido más largo de la temporada. La prueba comenzará con casi toda seguridad en la jornada del jueves con la disputa de la superespecial por la ciudad minera de Guanajuato y la posterior doble superespecial. La jornada del viernes tendrá un total de tres siete tramos, aunque tres de ellos vuelven a ser superespeciales. Los tramos de 'El Chocolate' y de 'Las Minas' aportan el grueso del recorrido con casi 70 kilómetros en conjunto.

La jornada del sábado será la más larga con nueve tramos cronometrados, entre los que se encuentra 'Ibarilla' con 30.38 kilómetros y 'Otates'. Los pilotos tendrán que realizar dos pasadas a este tramo de más de 42 kilómetros. A la dureza del kilometraje acumulado en una prueba que se disputa a una elevada altitud, lo que es perjudicial para los pilotos y sobre todo para los motores, se suma el tramo 'Guanajuato' con 80 kilómetros. Será el último reto de un Rally de México que apuesta por la dureza como primera cita sobre grava de la temporada.