Los nuevos Range Rover se salvan de las duros recortes de producción de JLR en Reino Unido
Para algunas marcas, la crisis de los microchips está llegando al final, para otras no tanto, aún queda un tiempo para regresar a la normalidad. Esta opinión es la que reina en el seno de Jaguar Land Rover. Las dos marcas británicas se han visto obligado a modificar su estrategia de producción en la factoría de Reino Unido
4 min. lectura
Publicado: 16/12/2022 17:05
Los británicos de JaguarLand Rover siguen sin recuperarse del azote de la crisis de los microchips. Los dos fabricantes siguen acusando gravemente el suministro de estos preciados componentes, prácticamente desde el inicio. Hace más de dos años que la marca de los todoterrenos y SUV por excelencia se vio obligada a retrasar la fabricación de las versiones híbridas enchufables de algunos modelos por la falta de este componente esencial, llegando a dar listas de espera de un año.
Pero mientras que algunas marcas han logrado respirar en esta situación, en el consorcio británico la situación es más convulsa. Recientemente, el francés Thierry Bolloré ha dejado su cargo de director ejecutivo de JaguarLand Rover, pero antes de marcharse ya avisó de que la situación de los microchips se hallaba estancada y que no tenía visos de resolverse antes de finales de año, lo que ha obligado a tomar serias medidas de urgencia, apunta un diario británico, recortando la producción en las sedes de Reino Unido.
Land Rover solo fabricará los dos grandes SUV, los más rentables
Las dos plantas a las que se refiere el periódico británico son las de Solihull y Halewood, que reducirán significativamente la producción de unidades enviando a casa a los trabajadores entre enero y finales de marzo de 2023, pues solo se fabricarán los modelos que mayor margen comercial ofrecen, esto es, los más rentables. Y concretamente, son dos modelos nada más de la amplia oferta los que se ven beneficiados, los nuevos Range Rover y Range Rover Sport.
El Range Rover Velar, que se encuentra en proceso de actualización de medio ciclo de vida, y el Jaguar F-PACE son dos de los que dejarán de producirse temporalmente, ya que de los dos turnos de trabajo en Solihull, solo quedará uno. Sin embargo, sí se reforzará con un turno especial la sección de estampación para la producción de los paneles de la carrocería de los dos grandes todoterrenos. En el caso de Halewood, la dirección de la marca también se carga uno de los dos turnos de producción, por lo que se reduce la fabricación de los Range Rover Evoque y Land Rover Discovery Sport.
Miles de pedidos de Jaguar Land Rover en el aire
Una situación que no afecta en absoluto a la producción del Land Rover Defender que se fabrica en exclusiva en la fábrica de Nitra, en Eslovaquia. El gran problema de las dos marcas británicas es que cuentan con una cartera de pedidos de más de 205.000 unidades, de las que 145.000 se reparten entre el nuevo Range Rover, Range Rover Sport y el Defender. Lo que sí es una realidad, a la vista de esta información, es que los retrasos en las entregas se van a extender por mucho tiempo.