El Range Rover Sport Coupé 2018 se prepara para atacar

El BMW X6 dejó huella abriendo un nicho que parecía un tanto abstracto en su momento, hace ya casi 8 años, pero el auge de los Sport Utility Vehicles que ahora vence su tiranía sobre el mercado permitió que este modelo se convirtiera en el halo de deportividad de este segmento, diferenciándose así de todos los demás e inaugurando la filosofía de los SAVs (Sport Activity Vehicles).

Las cifras hablan por sí solas y el éxito del X6 es indiscutible; un éxito al que se quieren sumar Mercedes-Benz con su GLE Coupé y ahora la firma de TTs y SUVs más popular de todos los tiempos: Range Rover.

El modelo que nos aborda en esta ocasión es el competidor directo del anteriormente mencionado y, como éste, utilizará la base de un modelo ya existente moldeándola hacia una figura más almendrada.

De este modo, el Range Rover Sport Coupé pondrá el punto más picante a la gama británica con una figura más estilizada gracias a un techo de acusada caída hasta la zaga; una zaga que se presume más acostada de lo habitual aunque el camuflaje intente engañarnos con ese "postizo" que se encuadra desde la luna posterior.

De costado se observa la típica e identificativa confuguración de techo de 'sándwich' de Range Rover que acompaña la pendiente del techo y una línea de cintura muy alta; recursos que afianzan las diferencias de este modelo con un Range Rover Sport al uso. Además de todo esto, el diseño de las ópticas delanteras parece afinarse para dibujar una mirada más sugerente mientras que los pilotos traseros se "jaguarizan" alargándose horizontalmente por el portón trasero en una posición muy elevada.

No cabe duda de los parentescos con un Jaguar F-Pace, con el que comparte plataforma y muchos otros elementos, aunque acicalados para darle el toque tan especial que solo Land Rover sabe darle a sus modelos más prestigiosos.

Fotos: Fotos: Baldauf/SB-Medien