El milagro de Recaro, un inesperado aliado italiano salva al rey de los asientos deportivos y no cerrará
In extremis. El famoso fabricante de asientos deportivos está a punto de salir del profundo pozo en el que se hallaba metida y que ya había cavado su sentencia de muerte, ha anunciado haber encontrado salvador en una empresa italiana. Recaro volverá a la actividad que mejor conoce a partir de enero de 2025.
Cuando cualquier atisbo de sobrevivir parecía imposible, y la muerte estaba asegurada, Recaro ha logrado salir a flote. El fabricante de asientos deportivos más famoso del mundo cayó en una profunda crisis el pasado verano al asistir estupefacto a la cancelación de un importante pedido con varios ceros en el montante, mientras sus dueños se limitaban a gestionar de una forma muy peculiar el uso de la marca.
Recaro pasó de ser uno de los más grandes a uno de los más inadvertidos, perdiendo a la excelencia de las marca europeas en sus bases de clientes. Un cúmulo de factores y circunstancias que, hace unos meses, llevó a Recaro a un punto de no retorno, en el que la quiebra técnica era tan real como el proceso de liquidación de la empresa. El objetivo era cumplir con los pedidos y echar el cierre definitivamente antes de enero de 2025, pero eso no ocurrirá al encontrar un salvador.
En un comunicado oficial de Recaro Automotive, la empresa ha anunciado que los italianos de Proma han firmado un acuerdo con el fabricante de asientos en Alemania, inyectando una cantidad desconocida para permitir que la actividad de producción se retome en enero de 2025, relanzando al proveedor en todo el continente europeo.
El rescatista italiano ha confirmado que los empleados de los departamentos de ventas y tecnología se mantendrán en sus puestos, aunque una parte de la fabricación de los asientos también se trasladará a Italia. Proma se encargará de la división de accesorios, lo que significa que estos se encargarán de producir los asientos que puedes comprar en tiendas especializadas, mientras que los pedidos de los fabricantes se continuarán haciendo en las instalaciones de Stuttgart.
Recaro y Proma dividen el negocio, pero el auténtico seguirá en Alemania
Luca Pino, CEO de Proma, ha señalado que «La inversión en Recaro Automotive fortalecerá nuestra capacidad de ofrecer unos asientos de primera calidad, al tiempo que adopta las innovaciones más avanzadas en el sector automotriz», añadiendo que «El nombre Recaro es reconocido en todo el mundo como un referente de la tecnología industrial alemana, y Proma Group, un símbolo de la excelencia de fabricación italiana. Una unión perfecta de futuro y calidad».
Proma es una gran desconocida, pero esta empresa italiana no es en absoluto comparable a los antiguos dueños de Recaro, sino que conoce perfectamente el sector del automóvil. La firma se dedica a la producción de componentes para automóviles, estructuras de asientos, conjuntos de carrocería y vigas para las suspensiones, con instalaciones en tres continentes, por lo que a buen seguro que devolverá a Recaro al lugar en el que siempre debió estar.