Renault bloquea en Alemania los pedidos del nuevo Megane E-Tech Electric

Todo estaba preparado para que el nuevo Renault Megane E-Tech Electric debutase en los concesionarios europeos a partir de mediados del próximo mes de abril, pero no va a ser así en Alemania. La crisis de los semiconductores, que parecía no estar afectando a la marca del Rombo mientras que al resto de fabricantes sí, ha demostrado lo contrario, por lo que la firma ha decidido paralizar los pedidos del nuevo crossover eléctrico en el mercado alemán.

Pero no es el único, porque las versiones híbridas enchufables del Captur y del Mégane también se ven afectadas. Los «E-Tech», especialmente en el crossover, estaban desplazando a las versiones de gasolina y diésel con un claro ascenso continuo, una situación que ahora también se paraliza para estos modelos de bajas emisiones. Por el momento Renaultno ha dado una fecha para la reapertura de los libros de pedidos, apuntando a un mes como mínimo. Situación que deseamos que mejore en cuanto sea posible.

La producción para Alemania pausada, pero en España sigue adelante

Uno de los portavoces autorizados por Renault ha señalado que «El objetivo es aclarar la disponibilidad lo antes posible y luego comenzar de nuevo, porque no se podrán pedir coches eléctricos por, al menos un mes». Ni siquiera se aceptan pedidos de los ZOE, Kangoo ZE y Master ZE. El gran problema no son solo los microchips, sino también las redes de cables que venían de Ucrania y el elevado coste de algunos de los materiales, lo que ha obligado a parar las producciones e iniciar la búsqueda de nuevos proveedores que puedan suministrar los diferentes elementos.

Tras hablar con Renault España podemos confirmar que para nuestro país, por el momento, sigue adelante la fabricación y entrega de los modelos según las fechas previstas, lo que transmite tranquilidad

No será así en Alemania donde se tenía previsto el lanzamiento del nuevo compacto eléctrico para el próximo mes, y con las entregas previstas para junio. De hecho, los únicos pedidos que se podrán satisfacer para este mercado son los realizados hasta la puesta en marcha de esta decisión hace apenas una semana. Lo cierto es que a los franceses no les ha quedado más remedio que sucumbir y tomar la misma drástica decisión de los alemanes de Volkswagen.

Los de Wolfsburgo se encuentran en la misma situación, la que los de Toyota y Volvo han podido superar por solo dos semanas volviendo a los tres turnos de trabajo y sacar todas las unidades posibles para entregas, ya que se han visto obligados a cancelar nuevamente uno de los turnos. Casi a trompicones, cuando llega nuevo material aceleran el paso de fabricación.

Fuente: Autointernationaal