Renault Sport desapareció para dejar hueco a Alpine, pero ahora quiere volver con más fuerza que nunca

Luca de Meo, CEO del Grupo Renault, lleva ya un lustro al frente del fabricante francés. A su llegada, el directivo tomó la decisión de reestructurar por completo la compañía, que por aquel entonces estaba atravesando serios problemas económicos. El nuevo plan corporativo, bautizado "Renaulution", incluía movimientos arriesgados como el establecimiento de una división de coches eléctricos y software separada, Ampere. El tiempo le ha acabado dando la razón: la salud de la empresa a día de hoy es excelente.

Actualmente, el Grupo Renault cuenta con cuatro marcas: Renault, Dacia, Alpine y Mobilize. Las dos primeras no necesitan presentación, mientras que la última fue creada en 2021 y cubre varios frentes: micromovilidad, energía, conectividad, financiación... Alpine por su parte data de 1955, si bien estuvo inactiva entre 1995 y 2012. La firma normanda, que está especializada en el desarrollo de automóviles deportivos, regresó oficialmente al mercado en 2017 de la mano del aplaudido A110.

Renault Sport se disolvió oficialmente en 2021

En 2020, Alpine volvía a estar en la cuerda floja, pero de Meo tomó la decisión de potenciarla y convertirla en la nueva marca premium del conglomerado. Sin embargo, esta apuesta conllevó un sacrificio: la desaparición de Renault Sport, la división deportiva de la firma del rombo, que se disolvió oficialmente en 2021. Su último modelo, el Mégane RS Ultime, llegó al mercado en 2023 y dejó de estar disponible el año pasado.

Establecida en 1976, Renault Sport fue la responsable de crear algunos de los hot hatches más apreciados por los aficionados, destacando especialmente las sagas Clio RS y Mégane RS, que hicieron las delicias de varias generaciones de petrolheads. Tampoco podemos dejar de mencionar al icónico Spider (1996-1999), una ligera barchetta equipada con el mismo motor de 4 cilindros y 150 CV del Clio Williams... montado en posición central.

Si bien Alpine continuará el legado de Renault Sport con propuestas como el nuevo A290, la versión de altas prestaciones del R5, no deberíamos descartar que la difunta submarca termine reviviendo en un futuro próximo, aunque sea de forma puntual. Y es que, con el planteamiento correcto, Alpine y Renault Sport podrían convivir sin solaparse entre sí.

Un regreso por todo lo alto

"Oficialmente, la insignia Renault Sport la pusimos en el congelador, y todo lo deportivo se basará en Alpine, pero eso no significa que a veces no vaya a revivir", ha confirmado el propio Luca de Meo durante una reciente entrevista. "Me han preguntado por qué el nuevo [R5] Turbo 3E no es un Alpine, y yo les he dicho: 'Lo siento, pero el 5 Turbo nunca fue un Alpine, fue un Renault, y si quieres hacer algo auténtico, tienes que respetar la historia del vehículo, así que va a ser un coche amarillo'. [...] Así que no me limito necesariamente a Alpine".

Fabrice Cambolive, CEO de la marca Renault, ha anunciado que el Turbo 3E verá la luz este mismo verano. Este modelo, heredero de los legendarios R5 Turbo y Turbo 2 de los años 80, no tendrá prácticamente nada que ver con el R5 estándar, con el que sólo compartirá algunas piezas como los pilotos. Y es que tanto su carrocería de fibra de carbono como sula plataforma serán específicas; no en vano, se tratará de un vehículo de tirada relativamente limitada.

Situado un peldaño por encima (o dos) del Alpine A290, este salvaje remake equipará dos motores eléctricos con una potencia combinada superior a los 500 CV. La tracción será a las ruedas traseras, como en el modelo clásico, y podrá completar el 0-100 km/h en aproximadamente 3 segundos.

Fuente: Autocar