Dacia Bigster 2025, el SUV que amenaza seriamente el futuro de un modelo de Renault

Luca de Meo llegó a la presidencia de Renault con un claro objetivo, sacar a la marca francesa del pozo en el que se hallaba después de la desastrosa gestión anterior. El italiano ha sabido encauzar al fabricante francés no sólo apostando por los coches eléctricos de aspecto retro, sino también renovando una gama de modelos anticuada.

Hoy, la oferta de Renault no sólo está plagada de SUV, sino que es prácticamente la única carrocería disponible. Los turismos tradicionales no tienen cabida, y el fenómeno SUV está lejos de desaparecer, por lo que renunciar a aprovecharse de ello es cuanto menos inútil. Esta filosofía no es un problema para los del Rombo, pero sí el hecho de que se aproxima un 2025 al que ya están calificando como de «complicado».

El Symbioz siembra dudas en Renault y el Arkana se marchará

El gran problema de Renault se encuentra en la parte media de su estructura de productos, con un Arkana que tiene los días contados y que, en cuestión de unos meses, comenzará con su particular operación de liquidación para decir adiós después de siete años. Un vacío que ocuparán con un Symbioz que también asume el papel dejado por el Mégane, pero que no terminan de ver claro, si no fuese por un rival que viene a por todas y se encuentra dentro del mismo grupo.

El nuevo Dacia Bigster es un serio peligro, y no sólo para la competencia. Algunos apuntan que el cliente tipo es completamente diferente, pero en Renault entienden que no lo es tanto en el caso del Symbioz. Lo cierto es que si lo medimos por lo que importa a una gran mayoría de clientes, que es el bolsillo, el Dacia Bigster cuenta con un completísimo equipamiento de serie en el acabado Extreme.

El duelo que Renault no va a poder evitar, Symbioz vs Bigster

En combinación con la versión mecánica híbrida de 155 CV, es absolutamente cierto que pone muy complicado el éxito del Symbioz. La diferencia será de unos 6.000 euros a favor del rumano que, en esta configuración rozará los 30.000 euros. El Arkana, con el atractivo de su diseño más deportivo, es el antídoto perfecto contra el rumano pero, frente al Symbioz, son rivales por naturaleza, ambos desarrollados sobre una misma plataforma, con algunas limitaciones técnicas en el caso del Dacia, pero que poco le importa a los clientes.

Uno va a salir «trasquilado», y está más que claro cuál va a ser. El éxito perpetrado durante años por Dacia ha obligado a ésta no sólo a mover ficha en un segmento más alto, sino que también es un premio al buen hacer durante año y un verdadero filón tanto de ventas como de ingresos, por lo que quizás el Symbioz haya sido un error. El Bigster empezará a llegar a partir de abril de 2025, por lo que en un año veremos.