Prototipos del Rimac C_Two prueban sus niveles de emisiones electromagnéticas
Al mismo tiempo que los de Rimac ya están fabricando los seis prototipos de pre-producción con los que afinarán los últimos detalles, la marca croata también realiza una serie de pruebas de emisiones obligadas en coches eléctricos: los niveles electromagnéticos. Éstas permiten comprobar el funcionamiento correcto de todos los sistemas a bordo del hypercar.
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Publicado: 28/12/2020 12:00
Las pruebas del nuevo Rimac C_Two continúan a pesar de que la marca croata está fabricando las pertinentes unidades de pre-producción. Actualmente, la firma se encuentra realizando ensayos en sus propias instalaciones, en las de proveedores y consultoras de ingeniería, y en pistas de pruebas privadas. Y es que el final del desarrollo está más cerca, programando las entregas para mediados de 2021.
Entre las pruebas que están llevando a cabo los de Rimac, figuran las obligatorias de emisiones. Este ámbito también llega a los coches eléctricos, pero obviamente no las de gases, sino las de ondas electromagnéticas que producen tanto los potentes motores eléctricos equipados para la propulsión como las que generan los diferentes equipamientos embarcados. Ese es el propósito de esta serie de prototipos.
La puesta a punto del Rimac C_Two, el hypercar eléctrico de los 1.900 CV, entra en su recta final
Los coches eléctricos generan un campo electromagnético en el que se mueve la energía, por lo que se controla que el flujo se encuentre dentro de unos límites máximos para la homologación oficial. Se prueban todos los sistemas, desde el climatizador y equipo de sonido hasta a los intermitentes, pasando por el propio sistema de propulsión, en entornos abiertos y cerrados, ya que un exceso en la emisión de ondas puede causar mal funcionamiento o daños tanto en el propio vehículo, como en infraestructuras del entorno.
Esta cuestión técnica es propia de todos los coches eléctricos, pero más todavía de un hypercar como es el Rimac C_Two, equipado con unos potentes motores eléctricos capaces de generar nada menos que 1.914 CV. Los croatas miden el impacto de las emisiones electromagnéticas en una cámara especial donde el aislamiento con el exterior es total. Sobre un banco dinamométrico, se pone a prueba al C_Two, incluso activando los modos de conducción más eficiente y más radical, los «Track» y «Range».
Los ensayos se multiplican varias veces, llegando al nivel de desmontar los prototipos y volverlos a montar, previa evaluación intermedia, para comprobar que el impacto en los componentes considerados clave se mantiene al mínimo después de someterse a radiaciones de entre 20 MHz y 20 GHz. Un método que ayuda a buscar una mejora continua de la calidad de todas las piezas.
Fuente: Rimac Automobili