Rinspeed Budii Concept, un BMW i3 autónomo y muy tecnológico

Es difícil predecir cómo serán los coches del futuro, pero sí están claras unas ciertas tendencias en el mundo del automóvil. Y Frank M. Rinderknecht, el fundador de la firma suiza Rinspeed, parece tenerlo muy claro, plasmando su particular visión en este prototipo que veremos en el Salón de Ginebra 2015.

El Rinspeed Budii Concept está basado en el pequeño eléctrico BMW i3, pero va mucho más allá, aunando conceptos como la conducción autónoma, la movilidad eléctrica y una máxima conectividad con el automóvil, buscando redefinir la interacción entre hombre y vehículo y llevarla a un nuevo nivel. Al fin y al cabo, eso es justo lo que hicieron Steve Jobs y Apple, reinventando el teléfono móvil y la interacción con él...

En este Rinspeed Budii se pone mucho énfasis en la conducción autónoma e inteligente, y remarcamos esto de "inteligente" puesto que prometen que aprenderá y evolucionará de forma que tenga en cuenta nuestras prioridades o las condiciones del tráfico que nos rodea, guiándonos de forma proactiva y no únicamente comportándose de forma pasiva. ¿Una especie de inteligencia artificial aplicada al automóvil?

Una de sus innovaciones más llamativas es su volante, desplazable mediante un brazo robótico de siete ejes. Si uno de los pasajeros delanteros quiere disfrutar de la conducción por sí mismo, el volante se acomodará a la posición más adecuada, y si no, se ocultará. En teoría, gracias a un volante con conexión eléctrica y no mecánica, como es habitual, su adaptación dentro del habitáculo podría adoptar infinitas posiciones.

Con un sistema de control de Harman al más puro estilo 'tablet' en posición central, en su salpicadero, y un apartado multimedia en el que su subdivisión Harman-Kardon pone la firma, el Rinspeed Budii va más allá de lo habitual en cuanto a tecnología, intentando facilitar los pagos en parkings mediante NFC, carga inalámbrica de nuestro smartphone, y mucha personalización de funciones, además de acceso y arranque, mediante nuestro teléfono.

Dentro de todo este maremágnum de pomposa demostración tecnológica, también hay un pequeño hueco para su diseño y base mecánica. Como intuirás con un simple vistazo a las imágenes, el Rinspeed Budii se basa en el BMW i3, con un diseño retocado que incluye una personalización al más puro estilo 'crossover', con nuevos paragolpes, más anchura de vías, llantas Borbet de 19 pulgadas o suspensión ajustable en altura hasta 100 milímetros.

En su exterior también se incluyen puertas de apertura y cierre eléctrico, junto a dos paneles luminosos multifunción, uno en su parte delantera y otro en la trasera, que sirven a modo de señalización de freno, intermitentes o luces de posición. Sorprende todavía más su escaneo constante del terreno, mediante un escáner láser sobre el techo denominado 'TrackView'.

Mediante el 'TrackView', el terreno bajo las ruedas del Budii se obtiene en mapas 3D que sirven para ajustar de forma variable y casi instantánea parámetros como la altura de la suspensión, permitiendo una conducción off-road menos problemática, a la vez que detecta posibles objetos, aumentando la seguridad.

En su interior, diseñado por Hornschuch y Strähle+Hess, más aires futuristas, con tapizados de 'skai', iluminación variable y pequeños toques de personalización de la mano de Mansory. Tras los asientos de los dos ocupantes delanteros se ubican dos pequeños medios eléctricos de movilidad personal, completamente plegables, para cuando se bajen del coche.

¿Estamos ante un prototipo visionario, que nos anticipa de forma fiel cómo serán los coches del futuro, o simplemente ante un vehículo recargado de tecnología para captar nuestra atención? Lo que es indiscutible es que la visión de Rinspeed es bastante radical a la vez que innovadora, y buscará su atención dentro de unos días, en el Salón de Ginebra 2015.

Fuente: Rinspeed