La Roborace se conforma con la versión 2.0 del DevBot

La Roborace nació como una categoría de vehículos autónomos sin piloto, aunque durante los últimos meses el concepto de este certamen ha mutado respecto al plan inicial. No obstante, pilotos profesionales ayudarán al desarrollo de las tecnologías autónomas durante las dos primeras temporadas de la Roborace, denominadas como temporada 'Alpha' y 'Beta'. Fruto de esta decisión, el uso del Robocar en su versión definitiva no es posible y los organizadores han tenido que recurrir a una variante mejorada del DevBot, el LMP3 de Ginetta adaptado con el que se han hecho la gran mayoría de los test de conducción autónoma de la categoría.

La Roborace tendrá de esta forma un carácter experimental durante los años 2019 y 2020, a pesar de ejercer de categoría telonera de la Fórmula E. Así, su primera temporada oficial no tendrá lugar hasta 2021, ya con el diseño definitivo del Robocar. Hasta entonces, la categoría utilizará el que se ha denominado como DevBot 2.0, o lo que es lo mismo, la versión mejorada del chasis LMP3 de Ginetta para adaptarlo a la estética futurista que define el Robocar. Este prototipo con cabina es eléctrico, tracción trasera y autónomo, además de poder ser controlado por un ordenador o piloto, para que los equipos puedan entender mejor su comportamiento.

El DevBot 2.0 será así un vehículo de pruebas con el que se buscará alcanzar la excelencia una vez que la versión definitiva del Robocar haga acto de presencia en 2021. Por ende, en esta fase de la Roborace no busca una gran parrilla y se espera que durante sus dos temporadas experimentales no haya más de 10 unidades del DevBot 2.0, ya que la prioridad es crear un software básico sobre el que los equipos o marcas creen sus propios algoritmos de Inteligencia Artificial. Además, por el camino se buscará que el futuro Robocar pueda alcanzar los 1.000 kW de potencia.

Fotos: Roborace