Nuevas fotos espía del Rolls-Royce Ghost Facelift 2025, la lujosa berlina recibirá una imagen más refinada y mejoras técnicas

Los coches de lujo también se actualizan. Rolls-Royce no entendía de facelift o restyling hasta que se dio cuenta de que sus clientes reclamaban nuevos alicientes durante el largo ciclo de vida de sus modelos. Según la marca del Espíritu del Éxtasis durante largo tiempo y siempre con el mismo argumento encima de la mesa: sus modelos estaban muy por encima.

Puede ser, pero una cosa no quita la otra, y mucho menos cuando la edad promedio de los clientes de la firma ya ha descendido hasta los cuarenta años. El Rolls-Royce Ghost Facelift 2025 se dejó ver durante las pasadas pruebas de invierno, prácticamente un visto y no visto, volviendo a ser cazado por nuestros fotógrafos en los alrededores del centro técnico de BMW en Múnich. La exquisita berlina de Rolls-Royce no se ha desprendido del camuflaje con el que contaba, pero sí deja ver detalles no vistos hasta ahora.

Fotos espía Rolls-Royce Ghost Facelift 2025

Aprovechando las temperaturas más cálidas de la capital alemana, se sigue viendo la nueva forma más fina y menos cuadriculada de los faros delanteros, al igual que la firma luminosa utilizada por las luces diurnas y por los indicadores de dirección en la parte superior de los mismos, pero no está claro si ofrecerá una personalidad muy diferente de la estrenada a bordo del nuevo Cullinan Series II.

Sin embargo, no está muy claro que las luces diurnas de LED no discurran por los bordes de la carrocería porque se aprecia un listón bajo el vinilo, y que se hace notar, que no sólo no encaja sino que además llega hasta las tomas de aire del paragolpes. Incluso, los perfiles decorativos en horizontal a ambos lados de la matrícula también se insinúan. Pero el mayor cambio se encuentra en la parte trasera, con unos pilotos cuyo diseño interno hereda del lujoso deportivo eléctrico Spectre, ahora con dos barras verticales muy brillantes.

Más tecnología en el interior del Rolls-Royce más «barato»

El interior del Ghost no será tocado más allá de una nueva interfaz en el sistema de entretenimiento y de un cuadro de instrumentos digital que sustituirá al clásico analógico de agujas aunque seguirá reproduciendo esta visualización. Los técnicos de Rolls-Royce también imprimirán mejoras en el chasis y en el motor V12 de 6.6 litros y 571 CV, así como en su cambio automático de ocho velocidades. Una novedad que no tardará mucho tiempo en ver la luz, prevista para finales de año.