El Rolls-Royce Phantom 2018 también se prepara sobre la nieve
Las cosas de palacio van despacio, y pocas marcas tan palaciegas como Rolls-Royce. La clásica marca inglesa lleva meses trabajando en el desarrollo del Rolls-Royce Phantom 2018, al que en estas imágenes vemos poniéndose a prueba en el norte de Europa.
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Publicado: 09/02/2016 12:00
El lujo también tiene que ponerse a prueba en condiciones extremas. Seguramente esta sea una de las pocas ocasiones en las que un Rolls-Royce se adentre por terrenos tan inhóspitos como el que vemos en imágenes. Y todo tiene un porqué, y ese no es otro que las pruebas invernales del Rolls-Royce Phantom 2018.
Y es que la casa inglesa quiere renovar su buque insignia, aunque ya sabemos que no es una marca dada a grandes cambios, alguno que otro sí que podemos apreciar en las fotos. Pequeños retoques en la parte frontal, con faros ligeramente modificados. Al igual que los traseros que son provisionales, como ya vimos anteriormente.
El mayor cambio de esta generación llegará en sus materiales. No es que Rolls-Royce vaya a perder un ápice de calidad, pero lo que sí va a perder es peso, mucho peso. La nueva generación empleará ampliamente el aluminio, para así descender unos cuantos cientos de kilogramos en la báscula.
Algo muy semejante a lo que ha hecho su marca matriz con el BMW Serie 7. Y es que la ligereza es la nueva interpretación del lujo. Este trabajo es más duro que dotar al Rolls-Royce Phantom de un mayor lujo o refinamiento, algo difícil de conseguir por otra parte. También se espera la llegada de la fibra de carbono en alguna que otra parte del coche.
El Phantom es un navío a la antigua usanza, pero la casa inglesa deberá cambiar eso para traerlo al siglo XXI. La primera vez que vimos esta generación fue en 2003, y no ha cambiado mucho desde un punto de vista tecnológico. Así que ese será otro foco de atención para la renovación, y una vez más será el Serie 7 el que ceda parte de su equipamiento.
La llegada del nuevo Rolls-Royce Phantom está programada para finales del año que viene o principios del 2018. Esto quiere decir que el modelo estará casi dos años en fase de pruebas, un tiempo mucho más elevado de lo habitual, pero que es lógico si tenemos en cuenta la marca que es y al público al que se dirige.
Fotos: Créditos de las imágenes: CarPix