El Rolls-Royce Spectre Lunaflair es un lujo sin par, el sueño hecho realidad de un deseo tan raro como su dueño
En cuestión de unos días se cumplirán dos años desde la presentación mundial del Rolls-Royce Spectre. El único eléctrico de la firma británica ha pasado por manos de preparadores pero, hasta ahora, no se conocía creación única alguna como la encargada por un exigente cliente. La terminación es brutal.
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Publicado: 01/10/2024 10:00
El Rolls-Royce Spectre es el único modelo de cero emisiones en el catálogo de la marca de la marca británica, y está a punto de cumplir dos años desde que fue desvelado ante los ojos de todo el mundo. Un superdeportivo que llegó para sustituir a otro de los modelos más lujosos y exclusivos del fabricante del Espíritu del Éxtasis.
El Spectre ha logrado cautivar a los ricos más pudientes del planeta, aunque por supuesto no a todos: solamente a aquellos a quienes no les importa que este Rolls-Royce pertenezca a uno de los mercados más desafiantes actualmente, el de los coches eléctricos. El sustituto del Wraight ya ha pasado por las manos de dos de los especialistas en tuning más famosos del panorama pero ahora se ha dado a conocer la primera creación especial de Bespoke.
El Rolls-Royce Spectre Lunaflair es un trabajo exquisito
Se llama Rolls-Royce Spectre Lunaflair y es una de las peticiones más exquisitas de uno de los clientes más exigentes de Rolls-Royce, en el que el trabajo de pintura del cuerpo de su carrocería es lo que verdaderamente se lleva la palma. Los especialistas en personalización de la marca de lujo se han esmerado para crear una pintura única en el mundo, con una característica holográfica que ofrece un efecto arcoíris.
Pero no por efecto de la lluvia, sino el del halo lunar. Este se genera cuando la luz de este satélite natural se refleja y se dispersa en cristales de hielo suspendidos entre 6.000 y 12.000 metros de altitud. Una de las peticiones más extrañas a las que se han enfrentado los químicos de Rolls-Royce, que han necesitado de un largo año para estudiar el proceso y elaborar una capa con finas escamas de fluoruro de magnesio y aluminio para generar un efecto metálico con poca luz que estalla en un arcoíris bajo un sol brillante.
3.000 horas, el equivalente a 125 días sólo para completar el exterior
Por dentro, el Rolls-Royce Spectre Lunaflair está revestido en cuero combinando tres colores -azul marino, blanco y rosa peonía- que sólo algunos ojos muy entrenados pueden apreciar durante el halo lunar. El estrellado techo «Starlight» se ha extendido a los paneles de las puertas. De su precio, como es habitual, no se sabe nada, es secreto, pero multimillonario seguro.
