Inversores chinos firman un acuerdo de compra de Saab

Saab se vuelve a salvar en el último momento y pasará a manos chinas. Swedish Automobile, actual propietaria de la firma sueca, ha informado que ha llegado a un acuerdo con la empresas chinas Pang Da y Youngman para la venta del 100% de las acciones de Saab por un montante total de 100 millones de euros que se pagarán en varios plazos.

El Acuerdo de Intenciones (MOU) al que han llegado todas las partes será válido hasta el 15 de noviembre, debe de ser aprobado por las autoridades competentes y los accionistas de la matriz holandesa. Swedish Automobile ha determinado que aprobará la transacción si Pang Da y Youngman se comprometen a ofrecer una financiación a largo plazo de Saab, además de existir otra condición relacionada con otro acuerdo de compra de acciones entre Swedish Automobile, el fabricante de coches chino Youngman y el mayorista Pang Da.

La desaparición de Saab Automobile sobrevuela la marca sueca desde febrero de 2009, cuando suspendió pagos por primera vez. A consecuencia de esto estuvo bajo administración judicial seis meses y recibió de un préstamo de 400 millones de euros del Banco Europeo de Inversiones, entre otras inyecciones de capital. Sin embargo, la situación de Saab siempre fue a peor y la estadounidense General Motors, propietaria por aquel entonces de la marca, decidió desmantelar la compañía.

La firma holandesa Spyker Cars, rebautizada como Swedish Automobile, apareció como salvadora y compró Saab en febrero de 2010. Sin embargo, las cosas no han mejorado desde entonces y el fantasma de la desaparición de la marca sueca siempre ha estado presente. Los problemas financieros son constantes y desde hace varios meses la producción está paralizada por falta de pagos a sus proveedores y problemas para pagar las nóminas de sus empleados.

Saab solicitó al juez acogerse a un proceso de reorganización voluntaria, figura similar al concurso voluntario de acreedores, iniciándose una reestructuración de Saab que fue suspendida después de que el administrador judicial pidiera la semana pasada su paralización por falta de fondos. Con este acuerdo entre Swedish Automobile y los inversores chinos llega una nueva inyección de capital para Saab y permitirá continuar con su reorganización. Así, y aunque la marca sigue bajo tutela judicial, el administrador que gestiona el proceso de reorganización voluntaria de Saab, Guy Lofalk, ha retirado la solicitud para poner fin a este proceso y se ha evitado que el juez decrete la suspensión de pagos.

Este acuerdo de última hora también ha provocado que la sociedad estadounidense North Street Capital haya revocado su decisión de conceder un préstamo de 60 millones de dólares (unos 42 millones de euros) e inyectar otros 70 millones de dólares (unos 50 millones de euros) en la firma sueca mediante la suscripción de 2,3 millones de títulos.

Los acontecimientos, que se han precipitado en las última horas ante el riesgo de que el juez decretara la suspensión de pagos de Saab, provocan que la sociedad estadounidense North Street Capital revoque su decisión de inyectar 70 millones de dólares (unos 50 millones de euros) en la firma escandinava, mediante la suscripción de 2,3 millones de títulos y la concesión de un préstamo de 60 millones de dólares (unos 42 millones de euros).