El 'Sandbagging' más peligroso para las 24 Horas de Le Mans más concurridas

La temporada 2023 se antoja vibrante. La ansiada convergencia entre prototipos LMH y LMDh se hará realidad y el número de fabricantes implicados en la categoría reina crecerá de manera exponencial. Los LMH de Toyota, Peugeot y Glickenhaus verán como mínimo la llegada de un nuevo rival con el prototipo de Ferrari, siempre y cuando ByKolles e Isotta Fraschini no se unan también a la fiesta. Del lado LMDh, Porsche y Cadillac tendrán presencia en el WEC.

Ocho fabricantes o estructuras -seis en un escenario tangible- pelearán por los honores en la clase reina del WEC en 2023 y lo harán con proyectos realmente divergentes, tanto por el concepto de los prototipos como por el estado de los mismos. Toyota Gazoo Racing afrontará su tercera campaña con el Toyota GR010 Hybrid, al igual que Glickenhaus pese al carácter más artesanal del proyecto de la firma americana. Para el Peugeot 9X8 será su primera temporada completa en el WEC.

Con una parrilla de al menos once prototipos, encontrar un equilibrio de rendimiento justo parece casi una tarea imposible

Entre los debutantes, Ferrari lo hace por la vía LMH, mientras que Cadillac y Porsche apuestan por el LMDh. Especialmente interesante es el proyecto de la marca alemana, puesto que el nuevo Porsche 963 ha acumulado ya casi 25.000 kilómetros de test. En el lado contrario de la moneda, los proyectos de ByKolles e Issota Fraschini siguen su curso, sin hacer mucho ruido, pero también sin que parezca que FIA y ACO tienen muy en cuenta sus propuestas.

Un resumen general que pone de manifiesto el arduo y completo que va a tener el WEC para lograr un 'Balance of Performance' justo y que permita competir a todos estos actores. Con una parrilla de al menos once prototipos, encontrar un equilibrio de rendimiento justo parece casi una tarea imposible. Y con el centenario, que no la edición 100, de las 24 Horas de Le Mans a la vuelta de la esquina, eso supone un peligro.

Sandbagging

Al final, las 24 Horas de Le Mans son la auténtica joya de la corona y existe la tentación de ocultar rendimiento en las primeras citas del campeonato para conseguir un 'Balance of Performance' favorable de cara a La Sarthe. Si bien esto penalizaría por completo la opción de un fabricante de luchar a nivel general por el WEC, esta circunstancia puede ser sacrificio aceptable si hay un buen resultado en Le Mans.

La posibilidad de usar la práctica conocida como 'Sandbagging' para ocultar el rendimiento está encima de la mesa, más si cabe en una temporada en la que gran parte de los prototipos son nuevos y es difícil calibrar de primeras su rendimiento real. Por eso no es descabellado que alguna de las marcas pueda ocultar su potencial para tener un ajuste favorable para las 24 Horas de Le Mans, sobre todo entre las que estrenan proyecto.

Mike Conway relativiza esta opción

Mirando en perspectiva, Mike Conway como piloto de Toyota pone de relieve que llevar a cabo esta 'Sanbagging' supone seguramente sacrificar el WEC: «La primera carrera separará un poco las cosas, pero se irá equilibrando según avance la temporada. Quien empiece fuerte, dependiendo del 'BoP', puede ver como todo cambia. Se puede llegar a utilizar el 'Sanbagging', pero si tienes la mitad del campeonato antes de Le Mans, tampoco puedes perder el tiempo».

«No deberías poner todos tus huevos en la cesta de Le Mans, si al menos quieres ganar el campeonato. Sin embargo, Le Mans ofrece más puntos y, sobre todo, tiene una repercusión inigualable. Estoy seguro de que alguno tomará esta vía. Creo que Toyota sabe lo que tiene que hacer y tiene ventaja en algunas cosas. Me encantaría ganar un título del WEC con todos estos fuertes rivales» ha concluido Conway.

Fotos: Peugeot Sport / Toyota Gazoo Racing