SEAT Arona TGI, una interesante opción asequible de movilidad sostenible
El nuevo SEAT Arona TGI se presenta en sociedad para ratificar la apuesta de la marca española por el gas natural comprimido (GNC) como opción de movilidad sostenible asequible. Bajo su capó, cuenta con un motor 1.0 TGI de 90 CV que puede funcionar tanto con gasolina como con gas natural vehicular.
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Publicado: 28/09/2018 13:15
La esperada versión TGI del SEAT Arona ya es una realidad. Cuando la marca española lanzó su nuevo crossover urbano ya confirmó que para esta época del año conoceríamos la versión de mayor carácter ecológico de toda la gama, y así ha sido. El nuevo SEAT Arona TGI ratifica la apuesta de SEAT por el Gas Natural Comprimido (GNC) como opción asequible de movilidad sostenible. Con motivo del Salón del Automóvil de París 2018 se festejará su puesta de largo.
Con el lanzamiento del nuevo Arona TGI, algo que ocurrirá a finales de año, la gama de SEAT de modelos TGI estará compuesta por cuatro miembros. Se sumará a los actuales León, Ibiza y Mii. En la actualidad y a falta de que SEAT inicie su particular aventura en la movilidad eléctrica, el gas natural vehicular es la alternativa con la que trabaja la marca para contribuir a reducir las emisiones de CO2 y de óxido de nitrógeno en las grandes ciudades.
El diseño y desarrollo del nuevo SEAT Arona TGI ha tenido lugar en las instalaciones de SEAT en Martorell, lugar en el que también será producido. Bajo el capó de esta versión del SEAT Arona se encuentra un motor 1.0 TGI con tres cilindros y 12 válvulas capaz de ofrecer 90 CV y 160 Nm de par máximo. El propulsor estará asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades y un sistema de tracción delantera.
Gracias a esta configuración mecánica, el SEAT Arona TGI podrá acelerar de 0 a 100 km/h en 12,8 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 172 km/h. Es capaz de funcionar tanto con gasolina como con gas natural comprimido. En las entrañas del Arona TGI se encuentra tres depósitos de GNC situados bajo el piso del maletero y la boca de llenado está situada junto a la de la gasolina. Los conductos de gas son de acero inoxidable y también dispone de sensores de presión de gas y un regulador de presión electrónico.
Dependiendo de las condiciones climatológicas el motor arrancará utilizando gasolina y, una vez se calientan los inyectores de gas y las condiciones lo permiten, activa el circuito de GNC. SEAT señala que esta operación puede tardar varios segundos. En circunstancias normales el Arona TGI solo utiliza gasolina como combustible alternativo cuando los depósitos de GNC se agotan.
Los depósitos de gas tienen una capacidad de 14,3 kg y ofrecen una autonomía de 400 kilómetros en modo GNC. A dicha cifra debemos de sumar los 160 km de autonomía adicional que ofrece el depósito de gasolina. Una de las principales desventajas es que, debido a la instalación de los depósitos de gas, el maletero pierde volumen de carga. La cifra se reduce hasta los 282 litros frente a los 400 litros que ofrecen el resto de versiones del Arona.
¿Y cómo será la gama del SEAT Arona TGI? El crossover urbano de GNC podrá ser configurado en cualquiera de estos niveles de acabado: Reference, Style, Xcellence y FR. Ofrecerá las mismas posibilidades de configuración que cualquiera otra mecánica convencional que hay disponible actualmente.