Sébastien Ogier saca su lado más autoritario en el Rally de Montecarlo

Sébastien Ogier está en casa, en su hábitat natural. Y esa circunstancia unida al buen nivel del Toyota Yaris WRC y a su inmaculada lectura de 'carrera' hacen que el francés haya arrancado el Rally de Montecarlo con un nivel inalcanzable para sus rivales. Ni siquiera un inspirado Elfyn Evans ha conseguido estar a la altura de su compañero de equipo en los tres primeros tramos de la etapa del viernes. Y puede estar contento, ya que el galés no se ha 'desangrado' como los pilotos de Hyundai ante una mala monta de neumáticos. Mientras tanto, Andreas Mikkelsen oposita a ser el otro gran protagonista del 'Monte', primera cita del WRC.

La primera especial del día, todavía bajo la noche francesa, se convertía en decisiva. No a nivel de cronos, pero si por la monta de neumáticos que generaba. Y es que mientras que los pilotos de Toyota y Ott Tänak apostaban por una monta cruzada con sólo dos gomas con clavos, Thierry Neuville y Dani Sordo montaban tres neumáticos con clavos. Mientras que los primeros podían hacer uso de las gomas de seco superblandas en los dos tramos siguientes, Neuville y Sordo se veían obligados a rodar con una goma con clavos en terreno casi seco, con la consiguiente pérdida de estabilidad, grip y tiempo.

Y es que ni siquiera el SS3 ha podido justificar la monta de neumáticos de Neuville y Sordo, ya que en la primera pasada por 'Aspremont – La Bâtie-des-Fonts' ha tenido a Sébastien Ogier al frente de la tabla de tiempos. El francés superaba por 2,7 segundos a su compañero Elfyn Evans, dejando listo el asalto a un liderato que era de Ott Tänak y de forma puntual de Kalle Rovanperä. Sin embargo, Tänak bastante tenía con sobrevivir a los problemas de motor que ofrecía su Hyundai i20 WRC Coupé en la salida de las horquillas. Pese a todo, las diferencias eran 'pequeñas' para lo que se iba a ver a continuación.

Con carreteras casi secas y la posibilidad de 'levantar' suciedad, Sébastien Ogier se imponía de forma clara en el SS4 y en el SS5, siempre por delante de sus compañeros de equipo. Con una imagen sólida, sin fisuras y una monta de neumáticos perfecta, Sébastien Ogier cerraba el bucle matinal con 11,3 segundos sobre Elfyn Evans. Por su parte, Ott Tänak conseguía salvar el tercer puesto ante Kalle Rovanperä en el SS5, aunque ambos están a más de 24 segundos de Ogier, cifra que queda en nada ante el minuto que cede Thierry Neuville, trompo incluido en el último tramo del bucle.

Con todo, Dani Sordo ha sido el gran 'derrotado' en el inicio de la etapa del viernes tras dejarse más de dos minutos con el líder y es el último piloto del grupo de cabeza. Una situación que coloca al cántabro justo por delante del también inspirado Andreas Mikkelsen. El noruego es líder de la categoría WRC2 con un margen que ha crecido hasta los 23,8 segundos sobre Adrien Fourmaux. Ajenos al duelo de la segunda categoría mundialista, Pierre-Louis Loubet y Takamoto Katsuta cierran el 'top 10', en línea ascendente tras los problemas que tuvieron durante los dos tramos disputados el jueves.

Mirando al resto de categorías, Yoann Bonato es líder en WRC3, aunque el duelo con su compatriota Yohan Rossel está siendo muy apretado. De hecho, la diferencia entre los dos pilotos franceses se reduce a 6,3 segundos, mientras que Nicolas Ciamin completa el podio a más de un minuto del líder. Y como de franceses va la cosa visto lo visto, más que nada porque no hay otra opción dentro de la categoría R-GT, Emmanuel Guigou es el último líder al final del SS5, en este caso entre los Alpine A110 Rally que monopolizan la R-GT Cup en este Rally de Montecarlo.

El Rally de Montecarlo continúa este viernes (12:17h) con la celebración de los dos últimos tramos de la segunda etapa de la prueba. Pilotos y copilotos se enfrentan a un total de 41,23 kilómetros contra el crono.