Sébastien Ogier sigue ampliando su leyenda en el WRC, ahora con Toyota
El francés Sébastien Ogier ha alcanzado su séptimo título de campeón del WRC tras ganar el Rally de Monza. El piloto de Gap ha sido campeón con Volkswagen, M-Sport (Ford) y Toyota, a razón de siete títulos en ocho años.
5 min. lectura
Publicado: 07/12/2020 10:30
Sébastien Ogier vuelve a ser el rey del WRC. El francés ha conquistado su séptimo título de campeón del Mundo de Rallies en una temporada atípica disputada sobre un calendario de circunstancias de siete rondas por culpa del COVID-19. El cierre de la temporada en un Rally de Monza pasado por agua y nieve ha sido el mejor reflejo de lo que ha sido este peculiar año. Con todo, si hay algo que no cambia dentro del Mundial es la estampa de Sébastien Ogier y Julien Ingrassia celebrando sobre el techo de su coche un nuevo título, por mucho que no se diera el año pasado.
2019 fue quizá uno de los años más complicados de Sébastien Ogier en el WRC. Tras liderar el proyecto de Vokswagen y conseguir cuatro títulos, recalar en M-Sport y ganar otros dos campeonatos, el fichaje de Ogier por Citroën suponía el regreso a la que había sido su casa en la primera fase de su trayectoria. La ilusión por ganar su séptimo título consecutivo con una marca francesa estaba ahí, pero el Citroën C3 WRC no estuvo a la altura y Ott Tänak puso fin a la dinastía francesa del WRC, ya que Loeb y Ogier habían acaparado los títulos desde la temporada 2004.
Sin opciones de ganar con Citroën a corto plazo, Ogier fichó por Toyota y el fabricante francés abandonó el WRC por la puerta de atrás. Emprendía así un nuevo reto el piloto de Gap, en el que era su tercer cambio de equipo en cuestión de cuatro años. Sin embargo, Sébastien Ogier demostraba una perfecta adaptación al Toyota Yaris WRC desde el primer instante, hasta el punto de lograr un segundo puesto en el Rally de Montecarlo. Thierry Neuville privó a Ogier en los tramos del 'Monte' de su primera victoria con Toyota, triunfo que no llegaría hasta el Rally de México, ya que Ogier no logró subir al podio en Suecia.
La crisis sanitaria derivada de la pandemia de COVID-19 lanzó por los aires el normal desarrollo de la temporada 2020 del WRC y también el plan de Sébastien Ogier de poner punto final a su trayectoria en el Mundial al final de este año. Con el francés coqueteando con Toyota para ampliar su vinculación por una temporada adicional, el WRC volvió a la acción en el Rally de Estonia. El tercer puesto logrado en esta prueba quedó un tanto eclipsado por el abandono de Sébastien Ogier en Turquía por un problema de motor en su Toyota Yaris WRC. Las sucesivas cancelaciones por el COVID-19 dejaron poco margen de maniobra al francés.
Estos movimientos en el calendario dejaron un doble encabezado final en Italia, con los rallies de Cerdeña y Monza como últimas pruebas tras la cancelación del Ypres Rally. Con un tercer puesto en Cerdeña, justo por delante de Elfyn Evans, Ogier logró mantener vivo el campeonato y llevar su resolución a un Rally de Monza en el que el francés ha hecho valer su experiencia en este tipo de situaciones para lograr su séptimo título del WRC. 2013, 2014, 2015 y 2016 con Volkswagen; 2017 y 2018 con M-Sport y ahora 2020 con Toyota. El legado y leyenda de Ogier sigue creciendo, con la amenaza de lograr su octavo título en 2021.
Fotos: Toyota Gazoo Racing