A la venta el único Shelby Cobra Daytona perteneciente a Carroll Shelby

En las últimas semanas han salido a la venta varias piezas muy destacadas relacionadas con Carroll Shelby. En diciembre del año pasado nos encontramos con el único ejemplar fabricado del Dodge Viper GTS CS (CS de Carroll Shelby), un proyecto realizado en colaboración con el piloto tejano que tuvo que ser cancelado debido a su estado de salud, dejando un ejemplar único como recuerdo del proyecto. Tras el cual fueron anunciadas las subastas del Shelby Cobra 427 chasis CSX3178 y el Shelby Cobra 427 #CSX3178, sin olvidarnos del Shelby Cobra 427 Super Snake CSX3015, el único ejemplar superviviente de esta brutal variante sobrealimentada del Cobra S/C 427.

Todos estos ejemplares tenían una sola cosa en común, habían sido unidades de uso personal y propiedad del propio Carroll Shelby. Lo que en el mundo de las subastas en Estados Unidos solo puede significar una cosa: cotización más alta. Algo que ha quedado patente con las pujas millonarias de los ejemplares que ya han sido subastados.

El ejemplar que aparece en estas fotografías es aún más especial y raro que estos, aunque no es exactamente lo que parece, pues a pesar de que se trata de un ejemplar original no se corresponde con uno de los 6 bastidores del Shelby Cobra Daytona. La versión más mítica de este proyecto y uno de los deportivos estadounidenses más valiosos de la historia.

Esta unidad cuenta con con el número de bastidor #CSX2469 y nació realmente como un Shelby roadster convencional, pero este fue modificado a las especificaciones Cobra Daytona a petición del propio Carroll Shelby, propietario del vehículo durante años.

La configuración del modelo es idéntica a la de los ejemplares Daytona originales que fueron creados para competir contra el Ferrari 250 GTO en el Campeonato del Mundo de Constructores y en Le Mans. El motivo que llevó a Carroll Shelby a crear esta versión cerrada del Cobra es muy simple, conseguir una variante más aerodinámica capaz de superar las velocidades que alcanzaba el 250 GTO en la enorme recta de Hunaudières. En aquellos años, Les Hunaudières era realmente una recta completa, sin las chicanes que se añadieron años más tarde para ralentizar a los Sport Prototipos, donde los más afilados modelos de Enzo Ferrari lograban ser más veloces que los Cobra americanos.

No obstante, esta unidad no llegó a competir como tal, pues al ser fabricada años más tarde se tuvo que conformar con ser un cotizado histórico que se ha paseado por los festivales y competiciones de clásicos más exclusivos, como Monterey o Goodwood y con pilotos de la talla de Phil Hill, Derek Bell o Brian Redman.

Como ya te contamos en su día, los Shelby Cobra Daytona lograron vencer a los GTO en numerosas pruebas internacionales, alcanzando incluso el título de constructores en 1965, pero nunca llegaron a ganar su categoría en las 24 Horas de Le Mans.

Los ejemplares originales del Cobra Daytona son los más caros de toda la producción del modelo, excepción hecha del primer Cobra fabricado, el célebre bastidor #CSX2000 que alcanzó 13.75 millones de dólares en las subastas de Pebble Beach en 2016.

Este ejemplar del Daytona no suele estar incluido en el conjunto de los 6 Daytona originales pero tiene el estatus de haber sido fabricado por Shelby American y además a petición del propio fundador de la compañía. Su vendedor y propietario actual lo compró directamente a Carroll Shelby hace unos años y ha logrado mantenerlo en perfecto estado hasta el día de hoy.