Pieza única: el primer prototipo del Shelby GT350 1966 a la venta

Prototipo del Shelby GT350 1966.

Entre los múltiples ejemplares que Barrett-Jackson sacará a subasta el próximo mes de enero en Scottsdale encontramos una pieza muy interesante, uno de esos ejemplares que son parte viva de la rica cultura del motor de los Estados Unidos, el prototipo #001 del Shelby GT350 modelo 1966.

Encargados directamente por Ford a Carroll Shelby, que inicialmente expresó su disconformidad por considerar que el Mustang no era buena base para un deportivo, la saga GT350 se inició con auténticos vehículos de competición con base Mustang 1965, sobre todo los primeros 200 ejemplares, pensados para equipos y pilotos privados de la SCCA, incluidos 34 ejemplares GT350 R que salieron de la factoría ya con especificaciones de carreras.

Por tanto, estas primeras unidades 1965 contaban con bastidores mucho más agresivos y rígidos, con suspensiones pensadas más para pista que para calle, y tanto el equipamiento como el tacto del vehículo era más duro, algunas unidades no contaban ni con asientos traseros. Tras el modelo 1965, del que se fabricaron unos 562 ejemplares, Shelby preparó un modelo 1966 algo más dulcificado. No obstante, junto con los GT350 ‘65, estos siguen siendo los más ligeros y deportivos de toda la saga Shelby GT350 del Mustang de primera generación. Aunque el equipamiento era algo más completo y contaba con varias opciones de color de carrocería y no solo el icónico blanco Wimbledon White, que monta precisamente este ejemplar.

Cuenta con un acabado único en toda la serie.

El ejemplar que podemos ver en las fotografías cuenta con el número de bastidor SFM6S001, por lo que es el primer prototipo del GT350 1966 y sirvió hasta 1968 como vehículo de pruebas para el modelo y posteriormente como modelo de exposición, momento en el que por fin acabó en manos privadas.

Su condición de prototipo le otorgan una serie de elementos únicos que luego no estuvieron disponibles en las versiones de producción, como el techo de vinilo de color azul, este es el único ejemplar que cuenta con esa característica. De la misma manera, es de los pocos ejemplares que no fueron borrados del registro de Ford para luego ser pasados a las instalaciones de Shelby donde se convertían en el GT350, como también es de los pocos modelos ‘66 que estuvieron basados en el Mustang 1965. Por su condición de primer ejemplar fue empleado para la publicidad del modelo y eventos de prensa.

Por el momento, Barrett-Jackson no ha declarado estimación alguna de precio, ni tan siquiera de su precio de reserva, que lo tiene. Un ejemplar de 1966 del GT350 es considerablemente más económico que los del modelo 1965, aun así, son piezas muy valoradas. Una versión de producción en estado de concurso puede estar rondando los 255.000 dólares, por lo que podemos esperar un valor notablemente más alto para este, un ejemplar muy bien documentado y bien conocido por los especialistas.

Fotos: Barrett-Jackson