Skoda apunta que los Fabia, Kamiq y Scala tienen futuro, a pesar del retraso no confirmado de la Euro 7

La presión de los nueve países díscolos que le ha salido a la Unión Europa para la aprobación de la nueva norma de emisiones Euro 7 ha surtido un efecto muy positivo en la marca checa de los de Wolfsburgo. Un alto cargo de la marca de Mladá Boleslav ha confirmado que no habrá despidos y que el futuro de sus modelos más pequeños y barato, muy en el aire en los últimos meses, está garantizado más allá de 2025.

Italia, Francia, República Checa, Rumanía, Portugal, Eslovaquia, Bulgaria, Polonia y Hungría ya han expresado su malestar a la Unión Europea y su manifiesto desacuerdo con la implantación de la Euro 7, la norma más exigente en el ámbito de las emisiones contaminantes que, incluso, afectará a los coches eléctricos, en 2025. Una estricta norma que causará verdaderos estragos en las marcas, que no solo supondrá una indiscriminada subida de precios, sino que supone también la despedida de varios miles de empleados de la propia industria y de los proveedores, cifrada ya en unos 10.000 trabajadores.

Skoda confía en retrasar la Euro 7 entre dos y cinco años

Sin estos países a favor, Bruselas no podrá sacar la Euro 7 adelante como planea, por lo que es una minoría -y una mayoría suficiente- como para que el órgano competente, la Comisión de Transportes, se vea obligada a retrasar su implantación. Algo que en Skoda ya celebran confirmando que sus modelos más pequeños -los Fabia, Scala y Kamiq- tienen su futuro asegurado en producción por espacio de unos años más, y sin tener que despedir a sus empleados, los que han conseguido que la firma batiese récord el pasado año con un millón de unidades salidas de sus cadenas de montaje.

Martin Jahn, miembro de la junta directiva de ventas y marketing de Škoda Auto, ha ha confirmado que los modelos más pequeños tienen futuro en unas declaraciones a un periódico local checo, afirmando que «Los representantes de la Comisión Europea y los estados miembros obviamente ya entendieron que este era un plazo completamente irreal. Ahora estamos discutiendo la duración del retraso desde el momento de la aprobación, podría ser de dos a cinco años. Si eso sucede, nosotros no cerraremos ninguna capacidad de producción, no despediremos a nadie, y la producción en ese sentido, no daremos de baja prematuramente los modelos mencionados».

Los precios de los coches nuevos seguirán siendo caros aunque la Euro 7 se retrase

Hace tan solo unos días que ACEA, la gran asociación de fabricantes europeos de coches, ya anunció que de los 1,2 millones de vehículos producidos anualmente, con la nueva Euro 7 en vigor no sería posible producir entre 300.000 y 400.000 coches más pequeños y asequibles, además de que los precios de acceso se incrementarían considerablemente hasta los 20.000 euros del modelo más barato de la gama, una cifra inasumible para cualquier cliente.

Jahn, que espera que la propuesta de estos nueve países salga adelante y que se retrase entre dos y cinco años la Euro 7, plazo que se discutirá próximamente, permitiría a la marca poder adaptarse a los nuevos límites de emisiones, asumiendo que los precios de los coches nuevos de combustión seguirán siendo caros, por lo que el hecho de retrasar la controvertida norma no supondrá una reducción de los precios que es otra cosa distinta. Pero, al menos, se contendrían y no aumentarían.