El Skoda Octavia Pro de batalla larga se estrena en China con un estilo más deportivo

Las variantes más características del mercado chino son las de batalla larga. Versiones ligeramente extendidas cuyo único fin es ofrecer más espacio para las piernas de los ocupantes de la banqueta trasera. Una configuración que podríamos denominar tipo limusina, pero que por algún motivo no es empleada por los chinos en vehículos de representación o de uso con chófer, sino en los turismos de uso personal. Ya que consideran este espacio extra en la banqueta trasera como un símbolo de estatus.

Por eso podemos encontrar variantes alargadas en prácticamente todos los segmentos del mercado, aunque por norma general estas solo son desarrolladas sobre vehículos de tipo sedán, incluidos los sedanes de tamaño compacto y de silueta fastback como el nuevo Skoda Octavia.

El sedán checo no se libra de una de estas variantes y acaba de estrenar en el mercado chino el nuevo Skoda Octavia Pro. Un nombre bastante curioso dado que es idéntico al empleado por Suzuki en la nueva variante comercial del Jimny lanzada hoy mismo. Aunque esta variante del todoterreno japonés prescinde por completo de la banqueta trasera, al contrario que esta nueva variante larga del Octavia, que precisamente concede más espacio y protagonismo para los ocupantes de esta zona del habitáculo.

El nuevo Skoda Octavia Pro no se trata simplemente de un Octavia ligeramente estirado, pues estrena nueva configuración estética y algunas modificaciones de bastidor. Su principal característica es precisamente su nueva longitud total, que ahora es de 4.753 mm. Esto supone que el Octavia Pro es 64 mm más largo que la variante estándar del modelo, aunque el nuevo tamaño no ha sido obtenido estirando simplemente la distancia entre ejes, pues la batalla tan solo ha crecido 44 mm. El resto le corresponden a los nuevos paragolpes.

Novedades

Esta versión ha sido dotada de pequeños cambios estéticos para, curiosamente, hacerla más deportiva y agresiva visualmente. Por eso estrena nuevos paragolpes con mayores entradas de aire y formas algo más afiladas y dinámicas. Aunque no son idénticos, estos están claramente inspirados en las versiones RS del sedán checo.

A nivel mecánico solo vamos a encontrar una versión, el cuatro cilindros de 1.4 litros sobrealimentado que entrega 150 CV y que está asociado exclusivamente a una transmisión automática de doble embrague DSG y 7 relaciones. Otra novedad es el tren trasero, pues en lugar de contar con la barra de torsión de las versiones convencionales monta el más avanzado multibrazo trasero que solo está disponible para las versiones RS y Scout.