Volkswagen manda, los motivos tras la decisión de que el nuevo Skoda Superb Berlina 2024 prescinda de la versión PHEV

Skoda presentó hace tan solo unas semanas la renovada gama de sus buques insignia, los auténticos representantes de la marca checa en el segmento D. El Superb se ha convertido en una referencia para los que apuestan por las berlinas prácticas y con gran espacio interior, especialmente en las plazas traseras, considerado como un modelo de cierto nivel de representación. El papel de la variante familiar es el mismo pero con una mayor capacidad de carga en el maletero, y que se mantiene en la oferta, porque no todos los clientes quieren un SUV.

El Superb Combi ofrece un elevado nivel de confort como el de la berlina, sin ir más alto que un Kodiaq y también puede contar con tracción total. Pero, comparado con el modelo lanzado en 2015, la nueva gama Superb presenta una importante diferencia, y no nos referimos al diseño exterior, interior o al equipamiento, sino a la gama de motores, y donde Volkswagen ha tenido mucho que ver. La mano de los de Wolfsburgo siempre se hace notar, permanece vigilante ante los movimientos tácticos de las marcas que dependen de ella, como lo es Skoda y SEAT, y con los checos no ha tenido piedad.

Volkswagen se «carga» el Superb berlina híbrido enchufable

La generación del Superb, actualmente todavía a la venta, se estrenó hace siete años, y entre las importantes novedades que traía bajo el brazo se encontraba la primera versión híbrida enchufable, una opción mecánica que se hallaba disponible tanto en la berlina como en el familiar. Sin embargo, en esta nueva entrega de la saga Superb esta versión de bajas emisiones ha sido eliminada del Hatchback y solamente se encontrará disponible en el catálogo del modelo más práctico.

Equipada con el nuevo motor 1.5 TSI Evo, en lugar del antiguo y más que explotado 1.4 TSI, y con una poderosa batería de iones de litio y con una capacidad de 25,7 kWh, el nuevo Skoda Superb Combi iV contará con una autonomía máxima de 100 kilómetros. El modelo, que se fabrica en la planta multimarca del gigante alemán en Bratislava, comparte las mismas cadenas de producción que el también nuevo Passat, por lo que la versión híbrida enchufable se monta en ambos modelos reduciendo costes. En gran medida, es una verdad como un templo, pero también hay un detalle adicional que no les ha interesado comentar.

Un rival menos en Skoda, Volkswagen evita el fenómeno caníbal

Y es que la presencia de este sistema a bordo del Superb podría hacer mucho daño a la marca alemana al no contar con una variante sedán en el Passat, y con todo el viento a favor del checo frente al Arteon equipado con la misma mecánica, se «merendaría» al alemán antes de que abandone el mercado. En prevención, Volkswagen ha atado en corto a Skoda para evitar una masacre en las cifras de ventas, dejando frente a frente al Passat y al Superb Combi con el 50 por ciento de posibilidades para cada uno. La elección definitiva queda en manos de los clientes, pero al menos la marca alemana se asegura tener un rival menos.