Stellantis se separa de GAC en China, terminando con la producción local de Jeep
Los modelos de Jeep van a dejarse de fabricar en China, y no es la primera vez. Stellantis va a disolver su empresa conjunta con GAC después de 12 años de recorrido, por lo que volverá a importar coches desde el extranjero.
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Publicado: 19/07/2022 23:00
Poco ha durado la segunda parte de la aventura de Jeep en China. La primera vez fue entre 1984 y 2006, ya que AMC fue una de las primeras marcas en establecerse en China. La segunda vez terminará próximamente, ya que Stellantis ha anunciado su retirada ordenada de GAC-Stellantis.
Los motivos para finalizar la aventura china de Jeep son básicamente tres. En primer lugar, Stellantis anunció en enero su intención de aumentar su participación en la joint-venture con Guangzhou Automobile Group del 50% al 75%, ahora que la normativa lo permite. No pudo ser, así que han preferido desinvertir del todo y romper amistosamente con su socio chino. Algunos medios económicos vieron esto venir hace dos años.
Por otro lado, Stellantis justifica su decisión en que la empresa conjunta no está dando beneficios. La cuota de mercado de Jeep ha bajado mucho en los últimos años, por lo que ya no tiene sentido fabricar esos modelos en China. Se estaban produciendo localmente los Grand Commander.
En 2017 Jeep vendió 200.000 unidades en China. Después de la crisis de calidad y reputación en 2018, cayeron a plomo. En 2019 fueron 74.000 coches.
Nuevo Jeep Compass en el Salón de Cantón (2022)
El tercer motivo es que Jeep no abandonará el mercado chino por ello. A diferencia de generaciones de producto previo, ahora sí compensa importar los coches desde el exterior porque los aranceles son menos importantes y evita perder costes en la JV. Mantendrá su red de concesionarios y tratará de tener menos activos en el país.
BMW y Volkswagen aumentaron su participación en las JV chinas, algo permitido desde este año
De hecho, Jeep ofrece en China los Wrangler, Gladiator y Grand Cherokee importados desde Norteamérica. Sí, son más caros que otros productos chinos, pero son Jeep, y para los chinos la marquitis también existe -los que se la pueden permitir, claro-. Y con los modelos híbridos enchufables puede cumplir con la cuota impuesta por China.
Stellantis tratará de llegar a un acuerdo con GAC para liquidar la filial. Mientras tanto, en sus resultados financieros Stellantis va a anotar una depreciación de sus activos de unos 297 millones de euros en los resultados económicos del primer semestre.
Jeep Cherokee chino (2015)
Resumen de 12 años de colaboración
En 2009 se puso la primera piedra política de la joint-venture entre GAC y Fiat (antes de ser FCA), fundándose la empresa al año siguiente como GAC Fiat Automobiles Co., Ltd. En aquel momento, Fiat estaba obligada a asociarse con un fabricante chino y a que cada uno tuviese el 50% de la sociedad.
La nueva fábrica que se levantó en Changsha abrió sus puertas en junio de 2012, casi tres años después del primer movimiento, comenzando la producción de modelos Fiat. El primer modelo fue el Viaggio con carrocería sedán y después el Ottimo en formato compacto. La joint-venture acordó una segunda fábrica en 2013 en Cantón, que estuvo lista en 2016.
En 2015, China era el segundo mercado mundial de Jeep
A partir de 2015, se empezaron a fabricar los Jeep y se abandonaron los dos Fiat en 2017. Jeep se convirtió en la única marca de FCA en China. Primero comenzó la producción del Cherokee, después la del Renegade y Compass (2016), y dos años después el Grand Commander (2018). Los cuatro modelos estaban repartidos entre las fábricas de Changsha y Cantón.
Pero Stellantis ha ido acumulando un exceso de capacidad debido a la bajada de las ventas. Solo en 2021 GAC-Stellantis -renombrada al fusionarse PSA con FCA- tuvo una bestial caída de ventas, un 50% menos que en 2020. Una de las primeras consecuencias fue el cierre de la fábrica de Cantón en el mes de marzo.
De cara al futuro, Stellantis planea facturar en China 20.000 millones de euros en 2030, el 7% de sus ingresos previstos. En 2021, por comparar, Stellantis facturó 3.900 millones de euros entre China, la India y la región Asia-Pacífico a la vez. Stellantis mantendrá de momento la joint-venture con Dongfeng.
En cuanto a GAC, la unión con Fiat, FCA y Stellantis le ha brindado conocimiento para fabricar mejores coches. Algunos expertos creen que el modelo de las JV está acabado, y que ya no es necesario obligar a fabricantes extranjeros a compartir riesgos y conocimientos con los locales. China quiere que los suyos se busquen más la vida y está dejando de sobreprotegerlos.
