Llega la hora, el Subaru BRZ se despide de Europa con una edición especial en Alemania inspirada en el WRC

Contados ejemplares del Subaru BRZ son los que han llegado a los principales países europeos. El deportivo japonés fue anunciado a principios del año pasado en Austria, llegando posteriormente a otros mercados del continente, incluida también España donde los más rápidos han sido los más afortunados, pues el importador solamente asignó cinco decenas de unidades a nuestro país.

Uno de los modelos más exclusivos en toda Europa, al nivel de superdeportivos de prestigio que está a punto de decir adiós de forma definitiva. Para algunos será una sorpresa, pero para otros no tanto porque ya avisamos de que esta insignia de Subaru estaba llamada a desaparecer al no superar los nuevos requisitos de seguridad impuestos por la Unión Europea, y queda sólo un mes de la fecha maldita.

El Subaru BRZ Final Edition se despide en Alemania por lo alto

Una despedida que, en Alemania, dejará más satisfechos a los interesados, porque para este país se han destinado 300 unidades de una nueva edición especial del Subaru BRZ Final Edition con un equipamiento más rico y distinguido en uno de los deportivos que respetan las cualidades clásicas: motor delantero y propulsión trasera, como también sus compactas medidas.

Una combinación prácticamente única en el continente, por lo que si estás interesado puedes importar, y que en el BRZ alcanza una nueva cota con sus llantas de aleación firmadas por OZ Racing y pintadas en oro brillante. Pero también por otros detalles que pasan más desapercibidos como el sistema de escape con el nombre del modelo grabado a láser en los terminales o las alfombrillas con ribetes rojos, en las que se repite el nombre del deportivo o los asientos deportivos contorneados con tapicería de cuero.

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Un futuro sustituto del Subaru BRZ es un misterio

Lo que no cambia en el Subaru BRZ Final Edition es la parte mecánica. El motor de gasolina de cuadro cilindros y 2.4 litros en disposición bóxer sigue ofreciendo una potencia máxima de 234 CV, vendiéndose con una caja de cambios manual, o automática, ambas de seis velocidades.

Sólo nos queda esperar a que los japoneses den un paso al frente y que no nos priven en el futuro de un deportivo, como mínimo, de la misma talla y nivel del BRZ, a ser posible que no sea uno de los cuatro coches eléctricos que han prometido.