Un Subaru Impreza 22B STi es el nuevo modelo más caro de la historia de la marca
Un ejemplar en magnífico estado y con el volante a la derecha del Subaru Impreza 22B STi ha sido subastado en una plataforma online en Estados Unidos por poco más de 312.000 $, batiendo todos los registros anteriores de la marca y convirtiéndose en el nuevo Subaru más caro de la historia.
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Publicado: 21/04/2021 15:00
La plataforma Bring a Trailer vuelve a ser noticia tras la venta récord de un ejemplar impecable del raro Subaru Impreza 22B STi, un modelo de edición limitada que es tremendamente valorado por los aficionados de la marca y del mundo de las carreras, sobre todo aquellos que vivieron los éxitos de este atractivo modelo en el Campeonato del Mundo de Rallyes.
Aunque por norma general no solemos hablar de Subaru cuando se trata de subastas de clásicos muy valiosos o especialmente relevantes, lo cierto es que en pocos años hemos visto como se batía el récord al modelo más caro de la firma japonesa hasta en dos ocasiones y en ambas se trataba de variantes del mismo modelo, el Subaru Impreza 22B de finales de la década de los noventa.
El récord anterior se encontraba en manos del bastidor #001 del Subaru WRC97 22B, el primer ejemplar presentado públicamente de esta particular variante de 2 puertas del deportivo japonés y que en 2017 alcanzó una puja de 230.625 £ en un evento de H&H Auctioneers. En ese momento, esa cifra suponían 261.691 € y 292.695 $ al cambio.
555
Ese precio ha sido superado por la unidad de calle subastada hace unos días en la mencionada plataforma online, que alcanzó 312.555 $. Un precio cargado de simbolismo puesto que 555 era el patrocinador principal del equipo Subaru Prodrive en aquella época. Por lo que podemos suponer que su nuevo propietario es un verdadero aficionado del modelo.
Esta unidad se encuentra en perfecto estado y con muy pocos kilómetros de uso, alrededor de 40.000. Aunque lo más destacado es que se trata de una unidad con la configuración de volante a la derecha que ha logrado llegar a los Estados Unidos gracias a que su importador logró introducirlo con las exenciones que permiten la ley 'Show and Display', por lo que además de la incomodidad de no contar con el volante a la izquierda es un modelo que solo puede realizar unos pocos kilómetros al año.