2015, el año decisivo para la fabricación del SUV de Rolls Royce
Quién sabe que puede pasar. Muchas voces afirman que el proyecto se llevará a cabo, mientras que otras niegan categóricamente que eso vaya a suceder. El excelente año comercial que ha tenido Rolls Royce ha provocado que se levanten muchas especulaciones con la posibilidad de la incorporación de un SUV.
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Publicado: 08/01/2015 12:00
2015 va a ser un año de especial importancia para Rolls Royce. El gran éxito comercial cosechado el año pasado ha hecho que salten todas las alarmas en lo referente a un posible SUV. Está claro que es una decisión muy complicada, así lo ha comunicado el propio CEO de la marca, Torsten Mueller-Oetvoes, que deberá tomar la decisión junto con el resto del consejo de dirección este mismo año
La elección de fabricarlo o no dependerá en gran medida de si se fijan unas bases claras de qué debería tener el SUV. Los objetivos deben estar claros, mantener los estándares de rendimiento, confort y lujo son la principal preocupación de los responsables. No se puede perder un ápice del prestigio que tantos años ha costado ganarse, 111 para ser exactos.
En realidad hay muchas ganas de ver un SUV de Rolls Royce. Bentley está trabajando para hacer realidad el suyo, que si todo sigue con los planes fijados, lo veremos a finales de este año, aunque por el momento solo en fotos espía. La posibilidad de ver dos modelos de esta categoría en las dos mejores firmas de lujo será todo un espectáculo. Gran parte de la presión para decidir llega por esto mismo.
Mientras que se opta por un sí o por un no, Rolls Royce seguirá trabajando a su particular y propio ritmo de trabajo. A mediados del año que viene veremos un nuevo convertible, aunque se espera que mucho antes llegue la versión más radical y salvaje del Wraith, que nosotros ya os hemos mostrado. Con 633 CV derivados de su motor V12 será el más potente de todos los Rolls fabricados hasta la fecha.
Personalmente pienso que fabricar un SUV con el espíritu del éxtasis en lo alto del capó es una jugada excesivamente arriesgada para una firma que no está acostumbrada a ello. Sí, está claro que sería lujoso, refinado y potente, pero en cierto modo se perdería la esencia de Rolls Royce. Los ingleses siempre han sido ajenos a las modas, no veo por qué ahora deberían sumarse a esta.
Fuente: Automotive news