Estados Unidos investiga a Tesla por exagerar la autonomía de sus coches eléctricos

Elon Musk no gana para disgustos. El sudafricano sería de los que se salvasen en un nuevo naufragio del Titanic, pero ello no implica que sea tarea fácil. Su asiento es uno de los más calientes de todos los ejecutivos de la industria planetaria, y el último empujón lo ha recibido, una vez más, del poderoso Departamento de Justicia de Estados Unidos, el «DoJ».

La causa radica numerosos informes de alto perfil, que indican que los coches eléctricos Tesla no cumplen con las cifras de autonomía declaradas. Ha sido la propia marca la que ha dejado caer que el DoJ ha intensificado sus investigaciones sobre la compañía en fechas recientes.

Tesla ha exagerado la autonomía de sus coches eléctricos

En sus informes trimestrales ante la SEC, el regulador de las compañías que corren en Bolsa, Tesla está obligada a informar sobre los contactos con agencias gubernamentales en relación con posibles investigaciones. En su última comunicación al respecto, y según apunta el medio especializado Electrek, los californianos ha confirmado que la investigación se ha ampliado más allá de la conducción autónoma y el conocido «Autopilot». A las pesquisas, ya en marcha alrededor de su presunta falta de eficacia de estos sistemas, se han incluido citaciones para declarar sobre la autonomía de los vehículos.

En el informe puede leerse «La compañía ha recibido solicitudes de información, incluyendo citaciones del DoJ, con respecto a ciertos asuntos relacionados con beneficios personales (de Elon Musk), piezas relacionadas, autonomía de los vehículos y decisiones de personal».

Es la primera vez que Tesla declara sobre el tema. Previamente, cuando se les preguntaba, no negaban la situación, pero tampoco la confirmaban. En general, los usuarios de la firma suelen estar satisfechos con sus coches. Como en toda marca siempre los hay descontentos, y en verdad, el fabricante se esfuerza en mejorar muchos de los puntos de origen de las quejas. Falta de calidad en los acabados, una pintura deficiente, piezas que encajan mal, y otras que dejan de funcionar de forma prematura son habituales.

Pero lo que parece haber disparado el interés del DoJ es una larga retahíla de denuncias acerca de la inexactitud de su autonomía. Las acusaciones sobre lo poco realistas de sus indicaciones han llevado a los jueces a tomar partido en el asunto.

Tesla pone en marcha «La oficina de desvíos»

En julio, la agencia Reuters publicó un sonoro informe que apuntaba a que Tesla creó un departamento que se dedicaba en exclusiva a marear a los clientes más enfadados. No es que no los atendieran, sino que desde unas oficinas en Las Vegas, los iban desanimando cuando reclamaban sobre el tema. Se le llamaba a nivel interno «el equipo de desvío», y su función no era otra que cancelar citas en sus talleres para revisar por qué sus coches no se acercaban a la autonomía anunciada. Se les reseteaba la centralita online, les decían que era normal, que no pasaba nada y un largo etcétera.

Tras la publicación de esta noticia, varios propietarios de vehículos Tesla demandaron al fabricante de automóviles en una demanda colectiva, las llamadas «Class action», que suelen ser muy oídas por los jueces. La propuesta de los demandantes se basaba en haber recibido publicidad engañosa acerca de las autonomías estimadas por los coches que habían adquirido.

Corea del Sur también pide explicaciones a Tesla

Estados Unidos no es el único país donde le piden explicaciones a Tesla acerca de la diferencia existente entre la autonomía anunciada y la real. La entidad antimonopolio de Corea del Sur se metió en faena a principios de año con la misma cuestión sobre la mesa, y propuso imponer sanciones a la marca por exagerar la autonomía de sus coches eléctricos.

Prueba en vídeo del Tesla Model Y, un SUV eléctrico muy popular y producido en territorio alemán

Las investigaciones preliminares de la Comisión de Comercio Justo de Corea, conocida como KFTC por sus siglas en inglés, desvelaron que Tesla exageraba la autonomía de sus coches eléctricos. Las autoridades surcoreanas dejaron claro que las cifras expuestas en la publicidad no se correspondían con la realidad. De momento, la KFTC se ha limitado a remitir un informe al fabricante, pero en principio no ha acometido sanciones.

Elon Musk en el punto de mira el juez

En cuanto al asunto de los beneficios personales, se cree que podría tener que ver con un misterioso proyecto de casas de cristal promovidas por Elon Musk… para uso personal. El Wall Street Journal informó en agosto que los fiscales neoyorquinos estaban investigando el empleo de los fondos de la compañía en un proyecto descrito internamente como «una casa para Elon», y nada que ver con inversiones, desarrollo, tecnología o alguna jugada de su empresa.

En lo tocante a las «decisiones de personal», observadores y analistas hablan de la salida de ejecutivos clave. Algunos como Zack Kirkhorn, un hombre clave en su estructura, lo hicieron de forma repentina y sin dar muchas explicaciones de manera pública. No es el único.

Tesla aclaró en su reporte que de forma habitual recibe solicitudes de entidades públicas, reguladores, y ministerios relacionados locales, nacionales e internacionales. Muchas de ellas son citaciones judiciales, que no son más que solicitudes para comparecer ante un tribunal y presentar pruebas en calidad de testigo; dicho de otra manera, que no son acusaciones. O no al menos de momento.