Tesla Q2 2018: más pérdidas récord y promesas de rentabilidad futura

Superchargers de Tesla.

Ayer era el día señalado. Tesla presentaba los resultados financieros del segundo trimestre justo al cierre de las principales bolsas estadounidenses y como no podía ser de otra manera todos los focos se centraban en el evento de la compañía californiana, a la espera de conocer las nuevas sorpresas de la compañía (los más optimistas) o la debacle financiera de la firma (los más pesimistas).

Lo cierto es que todos esperábamos algo diferente en esta ocasión, aunque la verdadera sorpresa fue que aparentemente nada ha cambiado. Elon Musk fue el portavoz principal de una presentación en la que si bien se mostraron las cifras del impacto que ha tenido el aumento de la producción y entregas del Model 3, al final, las cifras totales han resultado ser demasiado parecidas a las de los últimos trimestres, con unas pérdidas millonarias, que por enésimo trimestre consecutivo baten el récord de pérdidas de la compañía.

Como ya señalamos en su momento, Tesla está viviendo este año un momento crítico de su historia. El largamente anunciado punto de inflexión en el que la compañía debe pasar de mero proyecto a verdadero fabricante de automóviles rentable, un paso que es mucho más complejo de dar de lo que parece, incluso cuando las ventas acompañan. Sin embargo, ahora, en los primeros compases del tercer trimestre del año, es muy pronto para poder ver signos físicos de las mejoras de la compañía. De ahí que realmente todavía no podamos asegurar que los vaticinios de Musk sean correctos (o no) y Tesla logre alcanzar la rentabilidad este año. Pero al menos sí que podemos afirmar que parecen estar en camino de lograrlo.

Resultados del Q2 2018.

La producción del Model 3 se ha estabilizado en un rango comprendido entre las 4.000 y las 5.000 unidades semanales, cifra más que suficiente para alcanzar la cifra de 55.000 unidades al trimestre (de media solo serían necesarias unas 4.583 unidades a la semana). Y sabemos que en estos momentos Tesla no está produciendo para vender, estan ensamblando directamente para entregar, pues las unidades ya están vendidas, por lo que nada nos hace creer que estas cuentas vayan a cambiar en la segunda mitad del año. No obstante, Elon Musk reiteró la intención de la compañía de elevar la producción hasta las 6.000 unidades mensuales, objetivo que ya no tiene tanta importancia como el ya logrado. Pero que de obtenerse, evidentemente mejoraría aún más los resultados.

Como podemos ver en la imagen superior, los ingresos del segundo trimestre aumentaron espectacularmente, pasando de los 2.735 millones de dólares a 3.357 millones, gracias principalmente a las entregas del Model 3. Sin embargo las pérdidas no disminuyeron en la misma proporción, pues fueron de 717,5 millones de dólares. Como nota positiva, las pérdidas fueron menores a las vaticinadas por algunos analistas, aunque este es el segundo trimestre consecutivo que supera la barrera de los 700 millones de dólares. En el pasado trimestre, las pérdidas fueron de 710 millones.

La gran pregunta es si durante el tercer y el cuarto trimestre, con el esperado aumento de los ingresos (y también del dinero en caja) Tesla será realmente capaz de eliminar esas pérdidas y tornarse rentable. Por el momento solo hemos podido ver los números globales ofrecidos por Tesla, por lo que quedan en el tintero numerosas otras cuestiones, como la cantidad de reservas que quedan activas del Model 3 o si el dinero que espera ingresar la compañía será suficiente para pagar el desarrollo de la ingente cantidad de proyectos o modelos anunciados. Por lo que la meta de la rentabilidad sigue sin ser un objetivo sencillo.