Tesla tiene que pausar de nuevo la construcción de la Gigafactory 4 en Alemania
Enésimo contratiempo en la construcción de la Gigafactory 4. En lo que va de año los problemas han sido logísticos, la pandemia de coronavirus, los grupos ecologistas, problemas administrativos e incluso bombas perdidas de la SGM. Pese a todo, la fábrica debería estar lista en julio de 2021.
6 min. lectura
Publicado: 08/12/2020 22:00
De nuevo la empresa automovilística de Elon Musk tiene dificultades para levantar la fábrica en Grünheide (Mark), a las afueras de Berlín. Otra vez se trata de un problema administrativo originado por colectivos ecologistas. Un juzgado administrativo de Frankfurt (Oder) ha ordenado detener la tala de bosque en el recinto de la fábrica.
El grupo ambiental Naturschutzbund Brandenburg (NABU) -Grupo por la conservación de la biodiversidad y naturaleza de Brandeburgo- ha logrado la paralización de la tala de árboles para no perturbar la hibernación de serpientes y lagartijas que pueden estar en el subsuelo. Ambas son especies protegidas.
No solo la tala puede molestar el descanso invernal de dichos animales, la propia construcción de la fábrica también. Es la segunda vez que los trabajos en los terrenos de Tesla se paralizan por la presión de grupos ecologistas, lo cual no deja de ser una gigantesca ironía por mucho que sea ley en mano.
Según la planificación de Elon Musk, la fábrica debería ser funcional el 1 de julio de 2021 para empezar la producción en serie. Los trabajos de construcción no habrán terminado, ya que está confirmado que también habrá fábrica de baterías en el lugar, nada más y nada menos que la mayor de Europa.
Se da las circunstancia de que Tesla empezó a construir la fábrica y levantar cimientos sin tener una autorización firme de las autoridades, han empezado a hacerlo por su cuenta y riesgo. Los trabajos de tala de árboles comprenden 91 hectáreas de extensión. En su momento fue un bosque plantado por el hombre.
Todavía puede haber problemas administrativos con las autoridades locales o grupos ecologistas, por no hablar de que si vuelve a aparecer una bomba de la Segunda Guerra Mundial (ya aparecieron siete) también hay que interrumpir los trabajos. Si todo esto no hay suficiente, hay más problemas a la vista: conseguir trabajadores.
Para que la fábrica pueda empezar a funcionar serán necesarios 7.000 trabajadores, mas otros 5.000 que se contratarían a finales de 2022 para lograr la máxima capacidad de producción (500.000 unidades al año). Primer problema, solo han asegurado 2.000 trabajadores de los primeros 7.000. El resto está pendiente de contratar a pesar de que Elon Musk piensa que hay codazos por pedir trabajo en su fábrica.
Varias son las razones que están ahuyentando a los candidatos: lo que se está apretando las tuercas a los trabajadores que ya están allí, la cultura de liderazgo fuertemente ligada a la personalidad de Musk, y que pagan bien (hasta posiciones no cualificadas), pero ciertos perfiles especializados no tienen problemas para encontrar empleo.
Tesla está metiendo mucha presión a los trabajadores para cumplir con los plazos. Los chinos levantaron la planta de Shanghái en 11 meses, pero los alemanes van a tardar algo más de un año. No ha ayudado la crisis del coronavirus, aunque parece que ha sido lo de menos. Tesla tiene fama de poner al personal a currar a destajo.
Mientras tanto, Tesla ampliará otra vez capital
En lo que va de año, Tesla ya multiplicado su cotización bursátil por siete y ya es la automovilística más capitalizada del mundo, o más valiosa que las tres grandes de Detroit juntas. Como ya supera los 500.000 millones de dólares, Tesla aprovecha para ampliar 5.000 millones de capital (el 1%).
La empresa pondrá en circulación casi 8 millones de acciones para captar billetes frescos, hasta un número total de casi 956 millones de títulos. Ahora Tesla cotiza cerca de los 500 dólares por acción, equivalentes a 2.500 dólares por título antes del «split» que se hizo en verano para hacerlas más asequibles.
En un año natural, Tesla ha multiplicado su valor casi por 10, es una burbuja gigantesca
En septiembre se anunció otra ampliación de capital por la misma cantidad. Tesla entrará pronto a cotizar en el prestigioso selectivo S&P 500 y es una de las empresas estrella del NASDAQ de Nueva York. Pese al COVID-19 y a que Estados Unidos vive un 11S/Pearl Harbor al día en víctimas mortales, su bolsa está en máximos históricos.