Thierry Neuville marca la pauta en el peculiar e inútil shakedown del Rally de Italia-Cerdeña

El Rally de Italia-Cerdeña es este año un rally laboratorio que va a servir para probar el nuevo formato comprimido al que posiblemente se acojan la mayoría de los rallies del calendario del WRC. Más allá de comprimir toda la actividad en poco más de 50 horas, uno de los puntos a tener en cuenta en este formato es que el shakedown pasa a disputarse en la misma jornada que arranca la competencia real.

Si la circunstancia de celebrar el shakedown a horas del inicio de la primera etapa se antoja como un factor limitante porque cualquier problema puede ser letal, el hecho de elegir una especial que nada tiene que ver con el rally es un tiro en el pie. El tramo de entrenamiento del Rally de Italia-Cerdeña se ha disputado en la pista de rallycross de 'Ittiri', lo que más allá del show no sirve para nada. Poco que llevarse a la boca entre el polvo en suspensión.

Un shakedown a pocas horas del inicio de la competición real y en un circuito de rallycross tiene muy poco sentido

Sea como fuere, Thierry Neuville ha marcado la pauta con un crono de 2:13.7 tras completar las dos pasadas de rigor. Las mismas dos intentonas que han hecho todos los pilotos prioritarios y porque el reglamento así lo marca. En esta ocasión no ha habido espacio para las terceras pasadas con copilotos VIP o cualquier otro guion. Lógico y normal, encorsetar todo implica poca libertad de movimiento.

Sébastien Ogier ha finalizado a medio segundo de Thierry Neuville. El francés viene de ganar el Rally de Portugal y buscará repetir triunfo con el tercero de los Toyota GR Yaris Rally1. A estela del piloto de Gap se ha situado Dani Sordo, en el que es su segundo rally de la temporada tras su debut en la presente campaña en Portugal. Por su parte, Ott Tänak ha sido cuarto y el japonés Takamoto Katsuta.

Los 'Rally2' asoman la patita

Tan poco representativo ha sido este shakedown en un circuito revirado como el de 'Ittiri', nada que ver con las especiales veloces, angostas y de superficie dura que dan vida al rally, que los mejores pilotos de la categoría de plata se han intercalado con los grandes nombres del WRC. De hecho, Pierre-Louis Loubet ha terminado sexto a los mandos de su Skoda Fabia RS Rally2, con el añadido de haber completado sólo una pasada ya que para WRC2 no existe por norma la obligatoriedad a hacer dos intentos.

De igual forma, Martin Prokop se ha colado en el noveno lugar, quedando así entre los dos mejores 'Rally2' tanto Adrien Fourmaux como Elfyn Evans. El piloto francés es la única baza de M-Sport, ya que Grégoire Munster ni está ni se le espera. Por su parte, Evans llega a Cerdeña con la necesidad de dar un golpe encima de la mesa tras un Rally de Portugal que no le fue ni mucho menos como esperaba.

Cuatro tramos para empezar

Tras este shakedown que ha terminado con Fabrizio Zaldivar como último integrante del 'top 10', la acción real no tardará en llegar. En cuestión de pocos minutos los pilotos se enfrentarán al primer tramo real de la prueba, la especial de 'Osilo-Tergu'. La comprimida primera etapa del rally cuenta con cuatro tramos que se disputan en dos especiales a doble pasada a lo largo de la tarde de este viernes.

Servirá esta primera etapa para ver cómo evolucionan los tramos de cara a la segunda pasada por los mismos. Si algo define Cerdeña son sus tramos con una capa fina de tierra que con el paso de los coches se evapora, dejando al descubierto piedras que suelen causar pinchazos en las segundas pasadas por los tramos, en lo que también suelen haber roderas más o menos marcadas.

Fotos: FIA WRC