Tiempos revueltos para Jaguar Land Rover

Jaguar Land Rover no solo es que quiera dar un salto hacia motorizaciones más limpias, es que lo necesita. A medio plazo este fabricante irá deshaciéndose de las mecánicas de gasóleo, pero actualmente son muy necesarias para que su negocio vaya bien. El impacto del Dieselgate se está notando de forma más que apreciable.

En torno al 45 % de las ventas de Jaguar Land Rover corresponde a modelos diésel

El Dieselgate ha provocado un clima de hostilidad hacia estos motores por sus emisiones contaminantes -superiores a las esperadas-, en algunos países han subido los impuestos, pero también ha caído la confianza del consumidor en estas mecánicas.

Solo en el mercado británico las caídas de las matriculaciones en modelos diésel están en torno al 30 %, en la línea de lo que han caído otros grandes mercados europeos -Reino Unido es el segundo en importancia y volumen-. Cuando un fabricante vende prácticamente 9 de cada 10 coches con motor diésel en algunos segmentos, el impacto es inevitable.

Jaguar Land Rover ya está en proceso de unificar sus seis plataformas en una sola, MLA, lo que ahorrará mucho dinero

Pero no tiene todo que ver con los diésel, es que los principales modelos del fabricante están sufriendo un retroceso en ventas y el impacto va camino de ser generalizado. En abril se dieron señales de alarma cuando JLR anunció 1.000 despidos en la planta de Solihull. Parte de su trabajo lo asumieron compañeros de Castle Bromwich; ambas fábricas quedan cerca, en Birmingham.

En septiembre se anunció una semana laboral de tres días a la semana en Castle Bromwich de octubre a diciembre, para evitar despidos, por la caída de demanda de varios modelos clave: globalmente el XE ha caído un 25 %, el XF un 17 %, el XJ un 45 % y el F-Type un 24 %. Parte de sus clientes han pasado a E-Pace y F-Pace, que ya superan la mitad del total.

Ahora es la planta Solihull la que anuncia otro parón: dos semanas de cierre ante la acumulación de stocks, el frenazo en China (un -46,2 %) por la guerra comercial con Estados Unidos y la demanda menguante en Norteamérica (-6,9 %). Desde el 22 de octubre la planta mandará a los trabajadores a casa dos semanas, evitando también tener que despedir gente.

Pero puede ser peor.

Plan de producto para los próximos años, con protagonismo absoluto de la electrificación

Sigue estando en el aire la posibilidad de que el Reino Unido abandone la Unión Europea el 29 de marzo de 2019 -fecha del "Brexit"- sin que se haya cerrado un acuerdo comercial con el continente. La viabilidad de alguna planta puede verse comprometida a medio plazo si sigue cayendo la demanda.

Ya se han cumplido dos años desde que se produjese la fatídica votación del 23 de junio de 2016, con solo un 51,9 % a favor de la ruptura. Los resultados de esa votación serían diferentes hoy, más que nada porque han aflorado las mentiras que se han dicho a favor de esa postura.

La posición de Jaguar Land Rover no es baladí, prácticamente uno de cada tres turismos que se fabrican en el país los hacen ellos. Tienen tres plantas:

• Halewood: Land Rover Discovery Sport y Range Rover Evoque
• Solihull: Jaguar F-Pace, Land Rover Discovery y Range Rover (normal, Sport y Velar)
• Castle Bromwich: Jaguar F-Type, XE, XF y XJ

Además, hay que contar con la planta eslovaca de Nitra, donde se hacen también los Discovery, y el i-Pace que hace Magna en Austria.

Afortunadamente para Jaguar Land Rover, está detrás el potente grupo Tata, de no ser así, estarían en serias dificultades por tantas dificultades juntándose a la vez. Aún falta año y medio para que empiecen a salir modelos híbridos o eléctricos en cada gama, el corto plazo es el principal problema para ellos.

Por otro lado, una de las debilidades de JLR es que salvo el SUV Evoque, no es que tengan modelos muy asequibles que digamos. Si se produce el "Brexit" inevitablemente sus coches serán menos accesibles en Europa continental. En su país natal la caída de la libra también ha tenido un impacto significativo desde la votación del "Brexit".

Lo mejor que le puede pasar a JLR es que se aclare de una vez qué va a pasar el 29 de marzo de 2019

El escenario más probable es que no haya acuerdo, vuelvan los aranceles del 10 % a ambos lados de la frontera y se ralentice el flujo de piezas. Eso significará que hay que aumentar los stocks, que aumenta también los costes, para afrontar interrupciones puntuales. Además, se espera una caída de ventas a ambos lados del Canal de la Mancha.