El Tour de Corse tiene pie y medio fuera del WRC

La FIA y el promotor del WRC están teniendo muy serios problemas para confeccionar el calendario de 2020. Bajo la gran premisa de mantener el número de catorce rallies impuesto por los fabricantes, ambos organismos no dan con la solución a la hora de dar cabida a los rallies de Japón y Kenia (Safari Rally). De hecho, la publicación del primer boceto del calendario del WRC 2020 se ha retrasado por dos veces, ya que la decisión de qué pruebas europeas eliminar no está siendo fácil. Cuadrar las fechas de cada prueba y mantener la proporción de rallies en tierra y asfalto supone un problema añadido.

Con todo, el Tour de Corse es uno de los rallies destinados a salir del WRC. Al menos ese es el sentir general en Francia, donde distintos medios colocan a Córcega lejos del Mundial para el próximo año. Las limitaciones logísticas propias de una prueba que se disputa en un territorio insular y la reducida cantidad de público son dos de las razones que habrían llevado a tomar esta decisión. Además, el Rally de Japón será una cita de asfalto y es muy probable que el Rally RACC de Catalunya también pase a disputarse sobre esta superficie, abandonando su formato mixto.

Aunque la historia del Tour de Corse se remonta hasta el año 1956 y ha sido parte del paisaje del WRC de forma habitual desde 1973, la última etapa de la ronda francesa en el Mundial de Rallies no ha sido tal y como soñaban los organizadores locales. La afluencia de público desde que la prueba volvió al campeonato en 2015 no ha sido la esperada y aunque las carreteras de la isla mediterránea son realmente atractivas, los contras parecen superar a los pros cuando estos se ponen en una balanza y más cuando hay otra prueba de perfil similar como es el Rally de Italia-Cerdeña, por mucho que este se dispute en tierra.

Fotos: Red Bull Content Pool