Toyota decepcionada con sus rivales japonesas de Nissan y Honda por no hablar sobre lo que más importa
Akio Toyoda es una de las voces más autorizadas de la industria del automóvil. El japonés ha dejado muy clara su postura frente a las negociaciones entre sus dos máximos rivales. Honda y Nissan no han llegado a un acuerdo.

La industria japonesa es muy particular. La mentalidad local en lo que a negocios se refiere no tiene ningún remilgo para buscar asociaciones entre empresas rivales. Es muy común. Estamos acostumbrados a verlo casi a diario. La corporación Toyota es el mayor fabricante japonés en materia de movilidad. En su haber cuenta con firmas como Toyota, Lexus, Hino y Daihatsu. Su trono ha estado en peligro si la asociación entre Honda y Nissan hubiese llegado a buen puerto. Toyota asegura estar molesta con dichas negociaciones al considerar que han dejado de lado una parte esencial.
A sus 68 años de edad, Akio Toyoda es una de las voces más autorizadas para hablar de la industria automovilística japonesa y global. Ya no sólo es que su abuelo Kiichiro fundase la empresa, sino que este la ha dirigido durante más de una década con excelentes resultados. En 2023, Toyoda cedió el puesto a Koji Sato, no sin antes celebrar el quinto año consecutivo como el mayor fabricante de la industria. Hoy, la corporación Toyota sigue liderando el camino, demostrando que su fórmula es la mejor para tener éxito.

Toyoda no comprende la negociación entre Honda y Nissan
Sin embargo, esa privilegiada posición ha corrido peligro por culpa de dos de sus mayores rivales. Nissan y Honda han estado a punto de firmar una de las alianzas más importantes del mundo. Las dos compañías no han sabido entenderse y, finalmente, en enero anunciaron el cese de las negociaciones. A Toyoda no sólo no le sorprende, sino que le decepciona. Considera que ambas marcas se olvidaron de un elemento esencial; los productos (los coches). Si bien ningún CEO mencionó nada acerca de posibles productos resultantes, el memorando de entendimiento firmado por ambas partes sí incluía ligeros detalles.
Nissan y Honda pensaron en construir una plataforma compartida así como el aprovechamiento de sinergías y tecnologías. A pesar de la falta de concreción, ese no fue el problema que arruinó las negociaciones. Honda y Nissan rompieron relaciones al descubrirse que Honda quería convertir a Nissan en una subsidiaria y no en una compañía hermana. La semana pasada, tras la renovación de su CEO, los de Yokohama han dado detalles concretos de lo que Toyoda echaba en falta, los coches. Nissan ha anunciado grandes planes a pesar de su delicada situación financiera. El Nissan Micra volverá a la vida como hermano del Renault 5.

Este mismo año, en cuestión de meses, hará acto de presentación el nuevo Nissan LEAF. El año que viene se lanzará al mercado el nuevo Nissan Juke, que contará con una variante 100% eléctrica. Para el resto del mundo también hay planes concretos, principalmente para Estados Unidos, su principal mercado. Nissan no se centrará exclusivamente en modelos eléctricos, aunque sí los convertirá en una parte fundamental de su cartera de productos. De forma paralela los ingenieros japoneses están trabajando en una nueva generación del sistema e-Power de la empresa. También se espera la recuperación de algunos modelos deportivos icónicos como el Silvia o el recién desaparecido Nissan GT-R.
Toyoda conoce mejor que nadie los entresijos de la industria automovilística japonesa. Lleva 40 años ocupando diferentes puestos de responsabilidad dentro de la empresa. Si bien reconoce que el volumen es una alegría para los resultados financieros, también puede «se vuelve realmente problemático». A nivel logístico resulta todo un quebradero de cabeza mantener en constante movimiento la cadena de las piezas y los componentes. Asegurar la entrega a tiempo de todos los elementos que conforman un coche no es sencillo. Más si cabe teniendo en cuenta que Toyota produce casi 11 millones de coches en todo el mundo a través de una extensa red industrial.
