El Toyota Hilux cumple 55 años, la historia de un pick-up que ha conquistado el mundo con 8 generaciones

La historia del Toyota Hilux es una de las más longevas de su categoría. El pick-up de la marca japonesa está celebrando su 55º aniversario que cumplió ayer, día 21 de marzo. Ocho generaciones de un modelo que se ha ido adaptando a los clientes, a los tiempos y a las más modernas tecnologías durante estas cinco décadas y un lustro, estrenando su primera versión deportiva con el sello de GAZOO Racing en esta última generación lanzada, la octava.

La historia de este modelo, que se vende en nada menos que 180 países, arrancó un 21 de marzo de 1968 con la primera generación, desarrollada íntegramente en Japón por la marca nipona y basada en un chasis con una suspensión delantera independiente y una trasera de ballestas. Fabricada por Hino, un constructor de camiones nipón, la primera Hilux llegó a Australia con un motor de 1.6 litros asociado a un cambio manual en el primer mercado y con dos bloques de 1.9 y 2.0 litros a Estados Unidos.

Las 8 generaciones del Toyota Hilux se han adaptado a los tiempos

Entonces, la caja de carga ya cumplía con la receta de ofrecer una resistencia soberbia, junto a una capacidad todoterreno sin género de dudas. La segunda entrega llegó en 1972, más grande, y estrenando el cambio automático y un sistema de frenos asistido. Seis años después, corriendo 1978 llega la tercera de una saga dando un verdadero paso de gigante, pues Toyota decidió ofrecer el modelo con configuraciones adaptadas a clientes profesionales y particulares.

Seguía contando con cabina simple aunque la doble cabina se estrenó con el acabado especial «Super Deluxe», se ofreció con dos distancias entre ejes y estrenó la tracción total a las cuatro ruedas.La opción de cabina simple y doble se hizo estándar en 1983 cuando se estrenó la cuarta generación, junto a la suspensión elevada. Entonces, Toyota ya tenía claro que la Hilux se había ganado el respeto y que ampliaba su oferta hasta 20 especificaciones diferentes volviendo a ser muy exitosa.

Tanto, que la quinta generación fue la verdadera explosión convirtiendo al modelo en uno de producción global. Los cinco continentes vendieron esta entrega de una Hilux más completa, disponible con propulsión trasera, tracción total, cuatro distancias entre ejes y cabina simple o doble, ampliando la oferta de configuraciones como nunca antes.

El futuro del Toyota Hilux está supeditado a la electrificación

La sexta Hilux llegó con un diseño inspirado en el modelo original, e introduciendo una importante novedad: una carrocería de doble cabina extendida con un mayor espacio interior y un acabado más lujoso. Era el anticipo de una séptima generación que terminó de explotar cuando se presentó en 2005. El diseño se volvió más lujoso a la vez que la caja de carga era aún más resistente y ofrecía una mayor capacidad. En Europa se convirtió en una referencia con dos dos motores diésel, el 2.5 D-4D con 102 y 144 CV y el V6 diésel de 3.0 litros con 171 CV.

Un modelo que se sometió a dos lavados de cara, más ligero el de 2008 que el de 2011, y en el que la tecnología se adueñaba del equipamiento. La octava generación se estrenó en 2015 y es la más refinada hasta la fecha, con un diseño más elaborado y hasta con el acabado deportivo GR Sport, plagada de tecnologías de control del chasis, tracción a las cuatro ruedas electrónica y un potente motor diésel de 2.8 litros y 204 CV que recibió en 2020, junto a opciones de conectividad propias de turismos y SUV.

Una historia que continuará marcada por la electrificación en un futuro más cercano en el que la tecnología HEV y PHEV planean sobre la novena Hilux y, quién sabe, si no también una opción 100% eléctrica con pila de combustible o batería, o conservando el motor de combustión tradicional aunque alimentado por hidrógeno caliente en un futuro más lejano.