El Toyota Prius 2016 también quiere tuning: así es el kit de carrocería de TOM's Racing

Desde su nacimiento, y pasando por todas sus diferentes generaciones, el Toyota Prius siempre ha destacado por un diseño muy particular y lleno de personalidad. Podrá gustarte mucho o poco, pero no se puede negar que tiene carácter propio y transmite justo lo que quiere representar el modelo: modernidad junto a ecología y bajo consumo.

De lo que no cabe demasiada duda es de que el aspecto del Toyota Prius es uno de sus puntos diferenciadores, haciéndose notar. Ahora bien, esta naturaleza de coche híbrido (que, como decimos, se refleja exteriormente en su diseño) no casa demasiado bien si lo que buscas es deportividad. Para ello también hay solución, y comienzan a llegar las primeras preparaciones para el nuevo Toyota Prius 2016.

Cabe preguntarse si el tuning y el Toyota Prius son buenos compañeros. ¿Tiene sentido una preparación mecánica o estética en un modelo en el que todo -desde su motor a su aerodinámica- están pensados para un mínimo consumo y emisiones contaminantes? Mucho me temo que esta cuestión admitiría muchas respuestas y matices, pero en cualquier caso, el nuevo Prius comienza a recibir sus primeras preparaciones tuning.

Toyota dispondrá de accesorios originales TRD para el Prius 2016, pero también habrá oferta por parte de terceros. TOM's Racing ha sido uno de los más madrugadores, presentando una personalización en forma de kit aerodinámico para su carrocería. No hay cambios mecánicos, por lo que el motor híbrido de 122 CV continúa intacto, limitándose a modificaciones estéticas.

Con un estilo más deportivo y agresivo, permite elegir entre dos spoiler diferentes para la zona inferior de su paragolpes delantero, junto a un nuevo difusor trasero, faldones laterales, suspensión rebajada y llantas de aleación multirradio.

TOM's Racing también oferta dos diseños de cuádruple salida de escape trasera (uno de ellos en acabado azul, combinando con el logotipo de Toyota), y este es el detalle que más chirría aquí: en un coche que busca emitir la menor cantidad posible de gases contaminantes e incluso puede funcionar en modo puramente eléctrico, quizás no tenga sentido darle tanto protagonismo a sus escapes...