Toyota trabaja en un híbrido deportivo

Toyota ha gastado muchos millones en el desarrollo de su tren propulsor híbrido y vaya que le está dando buenos resultados, con el Toyota Prius como el coche más vendido en Japón.

Y claro ese cerro de millones en investigación y desarrollo tiene que ser amortizado y además, si tan buenos dividendos le está dando, por qué no utilizarlo en nuevos modelos. Y esa parece ser la consigna de Toyota, cuyos planes son el de disponer de -al menos- una versión híbrida de sus modelos de aquí al 2020.

Sólo este año, el gigante japonés del motor fabricará un millón de propulsores híbridos que montará en su súper ventas Prius y en el Auris, pero las cosas no quedan aquí, ya que el sistema ha demostrado ser exitoso, tanto desde el punto de vista de su mecánica como en el financiero, que Toyota ampliará su gama de modelos híbridos utilizando el mismo tren motriz, que ha probado ser eficiente y económico y que además tiene una gran capacidad de adaptación a nuevos modelos, deportivos incluidos.

El esquema que está compuesto por un motor de 1.8 litros a gasolina que trabaja asociado a un motor eléctrico y a un pack de baterías de níquel sería acoplado a un modelo deportivo de la casa que competiría directamente con otro híbrido japonés; el Honda CR-Z.

Este nuevo proyecto de Toyota ha estado corriendo como rumor desde hace un largo tiempo en los pasillos de la industria, pero no sólo es un rumor, ya que tuvimos la ocasión de conocer en enero pasado durante el Salón de Detroit un prototipo de híbrido deportivo que pronto pasaría a fase de producción; hablamos del FT-CH, un coche que nos daría las claves del nuevo modelo.

Así las cosas y aventurando una fecha.... No creo que tengamos que esperar más allá del próximo año para conocer al rival del Honda CR-Z, equipado con el mismo tren motriz del Toyota Prius, pero con un nuevo lenguaje de diseño más futurista; al igual que el Honda, tal como lo insinuó el Toyota FT-CH en Detroit.

Fuente: Autocar