La última gran novedad de Toyota no es un coche, motor o batería… ¡es una ciudad!
Woven City es un proyecto de ciudad futurista que Toyota está a punto de hacer realidad. Una ciudad donde se darán cita ciudadanos y empresas para desarrollar ideas y tecnologías que mejoren la convivencia y la sociedad en general.
Toyota es uno de los mayores fabricantes de coches en el mundo desde hace mucho, mucho tiempo. Pero como están haciendo la gran mayoría de marcas, quiere algo más. Hasta el punto que el gigante japonés ya se quiere llamar a sí misma como una empresa de movilidad.
Entre sus planes, hace ya un lustro, en el CES 2020 de Las Vegas, presentó una idea que parecía muy alocada: crear su propia ciudad. Ahora, cinco años después, está a punto de hacer realidad la que ha llamado Woven City, en Japón, a los pies del Monte Fuji.
Se trata de un espacio de 70 hectáreas reconvertido desde una zona industrial en las que muy pronto, este otoño, empezarán a vivir un centenar de personas. Más adelante llegarán otras 260, para pasar a ser una comunidad de 2.000 residentes en muy poco tiempo.
«El objetivo no es 'ganar dinero' con Woven City, sino crear tecnologías que mejoren el mundo».
Woven City, una ciudad futurista
En realidad, Woven City sería más bien un enorme campus o un enorme espacio acotado en la ciudad de Susono, en Japón, donde la marca de coches busca crear un hogar para familias, empresas e inventores que busquen mejorar la sociedad.
«El objetivo es que tanto residentes como investigadores pongan a prueba, en un entorno a pequeña escala y controlado, cómo funcionaría la combinación entre el cuidado del medioambiente, tecnologías relacionadas con la autonomía, inteligencia artificial o robótica», explica Toyota.
Así será Woven City, la ciudad futurista creada por Toyota en Japón.
Las imágenes compartidas por la firma japonesa nos dejan ver el aspecto futurista que tendrán las instalaciones de Woven City. Habrá edificios grandes de cristal interconectados, un gran parque central, una plataforma elevada para conectar las diferentes estructuras, apartamentos, pistas de prueba…
Todo ello en un concepto de ciudad totalmente sostenible, con espacio relevante para la pila combustible de hidrógeno y la energía solar. El objetivo final es facilitar el desarrollo, la prueba y la validación de productos y servicios innovadores.
Una ciudad para gente innovadora
Habrá espacio para el desarrollo de vehículos autónomos, de experiencias nuevas de cultura alimentaria, cafeterías futuristas, innovaciones de máquinas expendedoras, espacios libres de polen…
Por el momento se dará cabida a empleados de empresas de Toyota o del Grupo Toyota, pero también habrá espacio para un programa de becas para empresas emergentes, académicos o simplemente personas que buscan desarrollar una idea original y ambiciosa. Desde la Inteligencia Artificial, hasta los taxis aéreos, los cohetes espaciales… «Un campo de pruebas para la movilidad».
Woven City, que tiene detrás una primera fase casi completada de 10.130 millones de dólares, buscará dar cobijo hasta 2.000 personas para ayudar a desarrollar tecnologías del futuro en tres áreas diferentes: energía, movilidad y personas. En el apartado de la movilidad, por ejemplo, buscan dar prioridad a los proyectos que persigan el objetivo de «cero muertes por accidentes de tráfico».
«Es una oportunidad para tejer juntos diversos puntos de vista, talentos y habilidades, para crear un nuevo tipo de tejido para nuestro futuro, un futuro en el que esperamos no sólo conmover a la gente, sino conmover corazones», comentaron los responsables de la marca japonesa, que están a punto de hacer realidad este megaproyecto.
